sábado. 20.04.2024
Aurelia Matellán, durante la entrevista
Aurelia Matellán, durante la entrevista

Los premios le llegan ahora tras toda una vida dedicada al trabajo. Aunque recaló en la hostelería "sin haber puesto una sartén al fuego", aprendió rápido y se convirtió en el alma de aquel restaurante de la Plaza Mayor de Zamora, "Los Hermanos", que fue el predecesor de Casa Aurelia, en Villaralbo.

Cocinando para un grupo de ganaderos pasó los dolores del parto de su segundo hijo y sus platos tradicionales, unidos a su tesón y a un carácter firme pero agradable, la convirtieron en la cocinera más conocida de Zamora. Ella es Aurelia Matellán, nacida en Rabanales hace 79 años, ahora ya la "abuela de MasterChef", programa en el que participó y en el que dejó constancia de su temperamento. Ese carácter debió gustar a los tres jurados Pepe Rodríguez, Jordi Cruz y Samantha Vallejo-Nágera porque la han llamado para participar en otras ediciones.

Y precisamente, está convencida de que su paso por el programa ha sido determinante para los reconocimientos que comienzan a llegar en su tierra. "Si no voy a MasterChef, nadie me hubiera dado premios por 50 años trabajando noche y día", aunque, al mismo tiempo, apunta que "los premios llegan cuando llegan y hay que esperarlos, pero no ir a buscarlos". El próximo lunes, 28 de junio, si irá a recoger la Medalla a la Dedicación Empresarial que le concede la Cámara de Comercio de Zamora.

Sentada en la terraza de "Casa Aurelia", la cocinera casi octogenaria rememora durante la entrevista que cuando llegó a Zamora desde los Pirineos catalanes, donde daba clases a niñas en un colegio religioso, "no había cogido una sartén", pero siguió el sueño de su marido "el catalán" y de profesión cocinero, de regentar un restaurante en la capital. Pronto, "Los Hermanos", nombre del negocio en la Plaza Mayor de la capital, pasó a ser "el restaurante de Aurelia", así que con el traslado a Villaralbo el matrimonio no se lo pensó y nombró al nuevo establecimiento "Casa Aurelia".

Allí ha dado de comer a políticos, "se llevaban mejor que ahora, comían todos en la misma sala y nunca hubo altercados", ganaderos de lengua larga que "cuchicheaban" sobre las "buenas hechuras" de aquella mujer que gobernaba la barra con paso firme y de paso los ponía firmes para que no alargaran las manos más de la cuenta, y hasta a "dos príncipes que me dejaron aquí, con los que no podía conversar porque hablaban otro idioma". Pero, como el lenguaje es universal, cuando acabó su estancia en el hostal, aquellos herederos de rango abolengo "casi se arrodillan para darme las gracias", relata Aurelia Matellán.

Con 79 años aún maneja con firmeza el negocio, que ha dejado en manos de sus dos hijos, a los que ella empujó a los fogones, no sin cierto arrepentimiento. "Podían haber estudiado, pero yo les metí en este lío", una aventura que dura ya 32 años en Villaralbo, que se unen a los 20 años que se mantuvieron abiertas las puertas de "Los Hermanos".

"Enamorada" de los productos de su tierra, Aurelia Matellán no se cansa de promocionar en la televisión los garbanzos de Fuentesaúco, el ajo o el lechazo. Su empeño ha llevado a recibir "pequeñas broncas" de Samantha Vallejo-Nágera. "Aurelia, que solo hablas de Zamora, que hay que hablar también de Castilla y León", le dice la presentadora a la conocida cocinera". La respuesta, se la pueden imaginar: "J***, soy zamorana y tengo que promocionar mi tierra, que aquí tenemos de todo. No voy a vender peces".

Aunque ya se ha retirado de los fogones, sigue apostando por la comida tradicional y lo deja claro cuando la llaman de "Masterchef". "Pepe, si no hay platos tradicionales, no me llaméis", le "ordena" al chef. De hecho, ganó una de las pruebas del programa con su receta de paletillas de conejo. "Me dieron a elegir varios platos y escogí el conejo. Sabía que iba a ganar", asegura. De aquel plato dieron buena cuenta algunos de los trabajadores del programa.

En el plano personal, "lamenta" entre risas que Loles León, que "es muy marchosa", no quisiera desposar al hijo mayor, aunque no desespera y asegura que "seguiré buscando novias para él", como un "castigo" por haberle espantado las chicas que se fijaban en él cuando el primogénito era un crío.

Con participaciones pendientes en "MasterChef Junior" y con la petición sobre la mesa de ser pregonera de las fiestas de Fuentesaúco por su promoción del garbanzo de la comarca, Aurelia Matellán se despide hablando del programa que la ha lanzado al estrellato: "Siempre me han tratado muy bien todos, pero Pepe es mi preferido". Aunque 3 de los 5 sacos de garbanzos de Fuentesaúco que llevó al programa los repartió entre los tres jurados, que "son muy majos todos".

Antes de volver a las cocinas para supervisar las cenas, Aurelia reconoce que la fama no le agobia. Desde su paso por el famoso programa culinario recibe comensales de todas partes de España para hacerse una foto con ella. La semana pasada, sin ir más lejos, una mujer y su hijo viajaron desde Madrid porque el niño quería una foto con la cocinera zamorana. "Yo encantada, Ya saben la cara que tengo", zanja. Genio y figura.

Aurelia Matellán: "Si no voy a MasterChef, nadie me hubiera dado premios por 50 años de...