martes. 19.03.2024
Colas
Colas cerca de la frontera con Polonia. Foto Paco Colmenero

Salimos a las 6:30 desde Alemania, dormimos en Núremberg, una ciudad que sabe mucho de guerra. Desayuno rápido y primer repostaje cerca, para intentar llegar a contactar con José Luis, mami Novoa y nuestro búlgaro conductor, un hombre con un corazón de órdago a grande. Parada en gasolinera y un frío que nos obliga a hacer todo rápido y a continuación en caravana como tantas otras camino del encuentro con nuestros compañeros de cabecera.

El 22 toneladas fiel a su cita y enorme como sus dueños esperaban pacientes para hacer una comida rápida esta vez perritos calientes y encaminar ya desde Polonia las últimas horas hasta llegar a la frontera con Ucrania. 

Seguimos con sorpresa de un alemán enorme que ve nuestro convoy y nos da 50€, para pagar el café, otro achuchón  de moral y reconocimiento. 

El "seguimos adelante" era recompensado en muchos momentos por pitadas cómplices, "hermaos" Portugueses, y alemanes sobre todo que arengaban nuestro paso de 90/100 pero de peso enorme y objetivo tozudo, cuidar de los más importantes en esta ocasión, los niños y las mujeres que salen de Ucrania, también de los heridos y de las necesidades básicas de los seres humanos vilipendiados por el ególatra y mutante Putin. 

Nuestro "Mac Giver " particular salmantino cuidaba de todos con su especial sentido del practicismo y los buenos consejos, avisaba y revisaba luces y comportamientos quizá no tan cívicos de algún coche que pasaba como un "avión" por las carreteras sobre todo alemanas.

Galería de imágenes. Fotos Paco Colmenero 

Ya en Polonia detalles dignos de cariño en las paradas, empleadas como Martina una polaca vestida de uniforme de su gasolinera que de rojo y gualda nos ayudaba en castellano. Había veraneado en Roquetas de Mar Almería y nos entendía perfectamente otro Ángel de la Guarda del camino hacia Ucrania. 

Muestras de cariño y complicidad a decenas. Señales de victoria y buenas noticias del llamamiento a la solidaridad para la vuelta de los 21 de Cracovia que al final podrían ser hasta 40.

En media hora más de 25 donaciones vía bizum para intentar cubrir nuestra vuelta con las mujeres y niños, todo un lujo y todo nuestro agradecimiento sincero y emocionado. Hoy ha habido lágrimas en todas las "furgos" Y en el camión.

Si llegamos a nuestro objetivo es en mucha medida gracias a la persona que se ha encargado de controlar nuestra empresa y proyecto, el hada madrina Gema, una enfermera que ha entrado y salido de un país en guerra decenas de veces y que ya es toda una experimentada en estas lides.

Ella allana camino para que podamos pisar con la fuerza del camión de José Luis y las seis voladoras furgonetas donde viajan Javi y Jenni, nuestros hermanos de cabecera, dos enormes hijos adoptados ya por todos y hermanados por el objetivo común de la solidaridad y la paz, seguidos de Paco y Mayya nuestra querida intérprete y hada de los contactos y los idiomas, tras nosotros un gallego como no, Iago un experimentado hombre de carretera y siempre una voz amable acompañada de el sayagués y también hermano más grande que el Duero y el Tera juntos, Germán, amo de las frases ingeniosas y certeras. A la zaga a veces nuestro Mac Guiver salmantino intercesor e interceptador además de proveedor de jamón nada menos que de Guijuelo, su Vito el viaja en la "Jamoneta" ya universal como el mismo. 

Momento ahora para quitarse el sombrero ante el Yayo del grupo, un amor de hombre con lesión en la espalda pero que aguanta como gato panza arriba en su montura y con siempre un "chascarrillo" que contar y con moraleja final basada siempre en el ánimo a todos, acompañado de otra conseguidora nata, hada, artista, Géminis y guapa Canaria que es capaz de localizar con ayuda de sus alumnos y amigos que habitan por media Europa, el alojamiento en tiempo récord en Alemania y Polonia para los 14 solidarios que nos han unido en esta empresa. Al final de esta caravana, no podía haber más que gente buena, de raíz sanabresa de donde son mis orígenes. Araceli compañera de la Opinión de Zamora y encantadora persona que acompaña a Javier otro sanabrés con corazón tan grande que el Lago de Sanabria se queda pequeño en extensión y superficie. 

No son halagos son certezas que daremos a conocer en otro artículo Dios quiera a la vuelta con especial atención para cada uno de ellos. 

El tercer día de camino todo está mucho más cerca, se siente la guerra desde esta mañana nuestra meta en la frontera de Ucrania con Polonia nos tiene a todos preocupados por las noticias de la entrada en la aduana. En definitiva todo está muy cerca. Momento de dormir en la frontera de Polonia con Ucrania a 35 minutos de un conflicto bélico que este domingo por la mañana en la aduana tendrá esperemos un final feliz. Más tarde en Cracovia y con Gema será momento para los 28 o 40 refugiados que podamos llevar a Zamora. Todos y cada uno de los zamoranos que nos han apoyado a los cuales les debemos nuestra gratitud y el reconocimiento han venido con nosotros apoyando y empujándonos hacia un objetivo común, ayudar a la paz combatiendo la guerra con solidaridad y ayuda desinteresada. 

Hoy dormimos tranquilos dentro de lo que cabe con más de 3.100 kilómetros a la espalda y con una donación de última hora de los Moralejo que nos va a permitir llegar de forma digna a Zamora con los que al principio eran los 21 de Cracovia, después los 28 y ahora podrían ser hasta 40. Hasta 3 furgonetas más de zamoranos solidarios podrían unirse a la vuelta con los refugiados. Que así sea

 

Cumplir con la promesa de paz y ayuda es la empresa de todos, quede claro y dicho que todos actuamos bajo la bandera de la ONG ACCIÓN NORTE personas que cuidan de personas. Una ONGD de pueblo que se engrandece con cada acción. 

Diario de un viaje hacia la guerra: Día 3 hasta la puerta de la guerra. Cielo, tierra,...