La decisión, avalada por técnicos de la Unión Europea, situaría a Zamora como referente continental en agricultura, ganadería y sostenibilidad rural, con la llegada de una importante inyección de fondos europeos, cuya cuantía aún no ha sido determinada, pero que estaría destinada a revitalizar el campo y frenar la despoblación.
El plan contempla incentivos económicos directos para favorecer el retorno de jóvenes al medio rural, con ayudas a la instalación, vivienda y explotación agrícola y ganadera. El objetivo es claro: que agricultura y ganadería vuelvan a ser actividades primordiales, generando empleo estable y fijando población en el territorio.
Repoblación forestal y empleo verde
Uno de los ejes principales del proyecto será la repoblación de miles de árboles en zonas especialmente castigadas por los incendios forestales, como Sanabria y la Sierra de la Culebra. La actuación se realizará de forma ordenada, planificada y sostenible, priorizando especies autóctonas y la prevención de futuros incendios.
Para ello, se creará una bolsa de empleo específica, ligada a trabajos forestales, mantenimiento del monte y vigilancia ambiental, lo que supondría una oportunidad laboral inmediata para cientos de personas en la provincia.
Gestión directa desde los ayuntamientos
Una de las novedades más llamativas del proyecto es el modelo de gestión. Los fondos europeos serían administrados directamente por los ayuntamientos, sin intermediación de la Junta de Castilla y León ni del Estado. El dinero sería auditado directamente por la Unión Europea, con el objetivo de agilizar los trámites, evitar retrasos administrativos y garantizar que cada euro llegue a su destino final.
Según estas mismas fuentes, el modelo busca eliminar “intermediarios innecesarios” y asegurar una gestión transparente, eficiente y cercana al territorio, evitando posibles comisiones o sobrecostes derivados de estructuras administrativas superiores.
Zamora, laboratorio rural de Europa
Desde Bruselas se valora especialmente que Zamora reúna “todas las condiciones” para convertirse en laboratorio rural europeo: baja densidad de población, alto valor medioambiental, tradición agrícola y ganadera y una urgencia demográfica que exige medidas valientes.
De confirmarse este plan, Zamora pasaría de ser un símbolo de la España vaciada a convertirse en punta de lanza del nuevo modelo rural europeo, marcando el camino a seguir para otras regiones del continente.
Eso sí… conviene mirar el calendario.
Porque hoy es 28 de diciembre.
Y como manda la tradición, no todo lo que reluce es Agenda 2030.
