Una nueva amenaza vuelve a poner en jaque la seguridad de los teléfonos móviles. Expertos en ciberseguridad han identificado un sofisticado software malicioso que se hace pasar por una aplicación legítima de protección antivirus, cuando en realidad espía la pantalla del usuario, registra cada pulsación del teclado y accede a información crítica, como datos bancarios.
El responsable de esta actividad es ‘Vultur’, un malware que ha ido perfeccionando sus técnicas de infiltración desde que apareció en el radar de los especialistas. En su versión más reciente, se presenta imitando a la popular aplicación McAfee Security, logrando así que miles de usuarios caigan en la trampa al pensar que están reforzando la protección de su dispositivo.
El método de propagación es tan ingenioso como peligroso. Todo comienza con un mensaje de texto que alerta de una supuesta transferencia bancaria. En el mensaje, se insta al usuario a llamar a un número de teléfono para obtener más detalles. Es en esa conversación donde, finalmente, se envía un segundo SMS con un enlace a la descarga de la falsa aplicación. Una vez instalada, el malware comienza a operar en segundo plano sin levantar sospechas.
El informe elaborado por la firma de ciberseguridad Fox-IT detalla que Vultur no solo espía la pantalla, sino que también registra toda la actividad del usuario, desde contraseñas hasta códigos de verificación, lo que lo convierte en una amenaza especialmente grave para la banca online.
Ante este escenario, los especialistas insisten en la importancia de adoptar hábitos de navegación y descarga responsables. La principal recomendación es evitar la instalación de aplicaciones que no provengan de tiendas oficiales como Google Play Store o App Store. Además, se aconseja desconfiar de mensajes que incluyan enlaces sospechosos o promesas urgentes que requieran una acción inmediata.
En plena era digital, donde los teléfonos móviles concentran cada vez más aspectos de nuestra vida diaria, desde el trabajo hasta las finanzas, los expertos advierten: la ciberseguridad no puede seguir siendo un tema secundario. La vigilancia digital está en aumento, y proteger nuestros datos personales se ha convertido en una necesidad urgente.