El Ayuntamiento de Zamora y Aquona han iniciado la mañana del jueves un proyecto de reforestación en el conocido como paraje de la Candeleta, junto la depuradora, en el que se plantarán un total de 775 árboles en un espacio de dos hectáreas. El objetivo de la empresa es ir disminuyendo su huella de carbono con el paso del tiempo y compensar las emisiones de CO2 emitidas por sus factorías en la provincia de Zamora. El municipio cede el terreno y es Aquona la encargada de asumir el importe de la plantación y el cuidado de la misma.
De esta manera, responsables de la sociedad indicaron que con este tipo de acciones "aumentamos nuestra capacidad de lucha contra los gases de efecto invernadero". En este sentido, Aquona continuará con sus proyectos de reforestación a la par que reducen sus emisiones de CO2 en sus factorías, que han pasado de "90 toneladas en 2017 a 55 en 2019", explicó el portavoz de la empresa.
"El objetivo de cara al año 2023 es disminuir la cifra hasta las 20 toneladas, de manera que podamos compensar las emisiones a la atmósfera con la plantación de bosques de 750 árboles cada año", detallaron desde Aquona.
La plantación de la Candelata estará compuesta por pinos, almendros y encinas. Especies autóctonas que ya estuvieron presentes en la reforestación realizada hace dos años también con la colaboración de Aquona en la zona de Valderrey y cuyo índice de aceptación ha sido del 96% de las plantas introducidas.
Francisco Martínez, Grupo Sylvestris, detalló que esta intervención ha sido resgistrada en la Oficina Española del Cambio Climático como un proyecto de absorción: "Se espera que en los próximos 40 años estos 775 árboles absorban 175 toneladas de CO2".
El Ayuntamiento reforestará un área de 40 hectáreas
Por su parte, Romualdo Fernández, teniente de Alcalde de Zamora, explicó que el Ayuntamiento está trabajando para medir la huella de carbono de la ciudad para saber qué medidas se pueden llevar a cabo para compensarla: "Estamos trabajando en una plantación de 40 hectáreas que ya estaba adjudicada, pero que finalmente ha tenido que paralizarse porque la Junta nos advirtió que en la ubicación elegida de algunas parcelas había especies vegetales autóctonas en peligro de extinción".
La zona afectada se encontraba entre el término municipal de Carrrascal y la carretera de Bermillo. Fernández indicó que la operación deberá volver a ser adjudicada toda vez que se conozca la zona en la que poder efectuar la reforestación sin perjuicio alguno de las especies autóctonas.