Principios de año 2020 en España y una borrasca denominada por los meteorólogos "Filomena" comenzaba a adentrarse en la Península Ibérica con tintes de gran magnitud. Un frente que fue pronosticado con suficiente antelación y los acumulados de nieve que se predijeron, pero que pese a ello sorprendió a los españoles del interior, convirtiéndosela en la "gran nevada" de los últimos tiempos.
Filomena asoló el panorama nacional con grandes nevadas, de hasta 50 centímetros en la capital española, que congelaron el día a día establecido en diversos puntos de la geografía española.
De igual manera se sintió en Zamora, con nevadas a lo largo y ancho de la provincia que provocaron inconvenientes en la circulación de vehículos y transporte. Las temperaturas bajaron drásticamente debido a la capa de nieve congelada, convirtiendo en pistas de patinaje peligrosas las aceras y calles.