jueves. 25.04.2024
Sandra y Virginia al frente de la frutería Viriato
Sandra y Virginia al frente de la frutería Viriato

En una tierra en la que sobran sueños y faltan oportunidades, la apertura de un nuevo negocio es siempre una buena nueva. Es el caso de Sandra y Virginia, dos hermanas naturales de El Piñero que han decidido emprender como autónomas con una tienda de alimentación en una de las zonas más transitadas de la capital como es la avenida de Portugal.

Si bien su idea inicial no era establecer su primer negocio en Zamora, la falta de oportunidades hizo que las miradas de estas dos jóvenes de 23 y 27 años se focalizaran en la capital: “La idea inicial era asentarlo en algún pueblo para intentar dar el servicio a gente mayor que en pueblos como el nuestro en el que por desgracia no hay tienda”. Sin embargo, la falta de locales adecuados para establecerse finalmente ha llevado a las hermanas a optar por desecharlo.

Su ilusión de dar vida a El Piñero o a algún otro municipio de la provincia les llevó por una búsqueda sin fin de espacios en los que desarrollar su negocio y que no fue fructífera. Ninguna de las ofertas de locales se adecuaba a las exigencias y requisitos del Ministerio de Sanidad para poner en marcha una tienda de alimentación, lo que obligaba a las hermanas a enfrentarse a un coste muy superior a la inversión prevista.

Imagen de la fachada del nuevo negocio
Imagen de la fachada del nuevo negocio

“Sí que hay un local que en su día fue tienda pero nos pedían una suma más elevada y al que había que sumar obras para hacer un baño cumpliendo con lo que dicta Sanidad”, precisa Sandra. Finalmente, el espacio ideal se presentó a un coste más bajo a la altura del número 21 de la avenida de Portugal, un comercio de cercanía que viene a enriquecer una zona necesitada en el tramo en el que desde La Marina hasta el puente de hierro.

Frutería Viriato pone a disposición del cliente también todo tipo de conservas, arroz, miel, aceite, productos lácteos y un amplio surtido de gominolas y golosinas. Todo ello reforzado con un servicio  a domicilio que supone un punto a favor para las personas más dependientes y con las vistas puestas a poder convertirlo también en “punto pack” de envíos de pedidos.

Por el momento, en los poco más de 10 días desde que el modesto pero encomiable negocio de estas dos hermanas lleva abierto, las sensaciones son buenas: “Estamos teniendo bastante éxito. Yo ya contaba con esa experiencia de atención al público y la necesidad de trabajar nos ha dado las fuerzas que ahora nos está devolviendo la gente”.

Zamora suma un nuevo negocio de la mano de dos hermanas veinteañeras