El pasado sábado, Argusino vivió una jornada cargada de emoción y gratitud, dedicada a quienes con su presencia y recuerdo mantienen vivo el espíritu y la esencia de la localidad. Fue un día para agradecer a los mayores, esos protagonistas nacidos hasta 1945, que con cada regreso fortalecen el lazo con sus raíces y su historia.
Pero no solo se homenajeó a los nativos; también se reconoció a todos aquellos que, de alguna manera, han llevado la historia de Argusino más allá, a través de documentales, cortometrajes, exposiciones fotográficas y relatos que mantienen viva la memoria colectiva.
Una vez más, Argusino demostró que su corazón sigue latiendo fuerte. La emotiva ceremonia contó con la compañía de familiares, amigos y vecinos, quienes celebraron juntos la riqueza de una comunidad que no olvida sus orígenes.
Así, Argusino reafirma su compromiso con su historia y su gente, celebrando a quienes son el verdadero vínculo entre el pasado y el presente.

