La encuesta realizada por la Comisión Europea revela que el 37% de los usuarios de vapeadores los considera menos perjudiciales que el tabaco tradicional.
La Comisión Europea ha presentado recientemente los resultados del último Eurobarómetro 'Actitudes de los europeos hacia el tabaco y los cigarrillos electrónicos' realizado por la consultora Kantar.
La encuesta, realizada entre más de 28.000 ciudadanos de toda la Unión Europea y Reino Unido, entre agosto y septiembre de 2020, muestran que 1 de cada 3 fumadores o exfumadores que utilizan o han utilizado cigarrillos electrónicos y/o productos de tabaco calentado reconoce que estos productos les han ayudado a abandonar por completo su anterior hábito de fumar cigarrillos convencionales.
Para el 37% de los encuestados, el vapeo resulta menos perjudicial que el tabaco tradicional, unos resultados que se se alinean con las preferencias de los europeos. Tanto es así que un 57% de los usuarios de cigarrillos electrónicos ha utilizado estos dispositivos con la finalidad de dejar de fumar o reducir su consumo de tabaco convencional. El uso de los dispositivos vapeadores es diario por parte del 55%.
Esta evolución supone un amplio avance respecto al último Eurobarómetro que analizaba estos datos, realizado en 2017, según los cuales un 52% de los vapeadores europeos admitía que los cigarrillos electrónicos no les ayudaron a reducir su consumo de tabaco, frente al 22% que lo constatan en este último estudio.
Figuras clave en el Reino Unido, como Jo Churchill, Subsecretaria parlamentaria de Prevención, Salud Pública y Atención Primaria del Ministerio de Sanidad y Asistencia Social, se han manifestado respecto al uso de cigarrillos electrónicos por parte de los adultos. Churchill apunta que "el Gobierno tiene claro que los cigarrillos electrónicos solo deben ser utilizados por los fumadores para apoyar su camino para dejar de fumar". Asimismo, afirma que el último informe llevado a cabo por Public Health England (PHE) no encontró pruebas de que vapear conduzca a los adultos a empezar a fumar.