Cuando nos referimos al concepto de usabilidad en una página web estamos haciendo referencia a algo que no siempre se comprende de la forma en la que se debería, por lo que podría dar lugar a ciertas confusiones; básicamente es la facilidad que el usuario puede llegar a tener en el momento en el que empieza a navegar por cualquier página de Internet.
La usabilidad web es crucial en todo tipo de páginas; da igual que estemos hablando de un blog sobre marketing, de una página de apuestas online, como Luckia, de una página personal…
Debido lo importante que esto es, tanto para que Google nos de las mejores posiciones, como para que el usuario pueda volver a visitarnos, debemos mejorar la usabilidad.
Para ayudarte con ello, te hemos preparado 7 consejos que te van a venir estupendamente.
Mejora la usabilidad de tu página web con estos consejos:
Tiempo de carga: Lo primero que tenemos que considerar es el tiempo de carga; es importante que sea lo más reducido posible para evitar penalizaciones de Google.
Nos centraremos en aspectos como elegir una plantilla que no sea pesada, desactivar todos los widgets/plugins que no nos hagan falta, así como cualquier otro aspecto relacionado.
Los enlaces: La pieza inamovible del tablero: Por muchos colores que queramos que tenga nuestra web, asegúrate de que los enlaces no se pueden llegar a confundir. Es decir, respeta en todo momento el estilo de los enlaces para evitar problemas.
Evitar recorridos innecesarios: Aunque es bueno que el usuario pase la mayor cantidad de tiempo en nuestra página, conviene no marearle demasiado; si detecta que la información es complicada de encontrar, probablemente se decante por encontrar lo que necesite en la competencia.
Cuidado con los menús sobresaturados: Uno de los errores más habituales que se cometen en las páginas es incluir demasiados enlaces en los menús. Vale la pena que aprendas a organizar la información y ofrezcas pocos apartados, antes de que el usuario encuentre tanta información que no sea capaz de aclararse con lo que ve.
Enlaces internos: Muchas personas piensan que los enlaces internos no son importantes y por esta razón, cometen un error muy grave. Si somos capaces de enlazar de forma distribuida al contenido de nuestra web, el usuario encontrará más fácilmente toda la información que necesita y con toda probabilidad, volverá.
Enlaces externos: Además, no debes de tener ningún miedo a enlazar cualquier fuente que te haya podido servir para confeccionar un determinado artículo. Esto es algo que está muy bien mirado por Google ya que le encanta que se contraste información y que se pueda apuntar a artículos como fuente. No te olvides de este recurso.
Y sobre todo, sentido común: A pesar de que todos los consejos anteriores se deben de seguir al pie de la letra, nunca debes de olvidar tu sentido común. El mundo de Internet cambia de la noche a la mañana, pero si sabes seguir tus propios instintos, seguro que podrás adaptarte a todos los cambios.