Es común que en el mundo del deporte se oiga que el equipo más peligroso es aquel que no tiene nada que perder. Precisamente, ese es el temor del Zamarat. Este sábado recibe a Claret, equipo valenciano que ocupa el decimotercer puesto y que llega al Ángel Nieto con la relajación de saber que se mide a uno de los gallitos de la liga.
Tal y como expresaba Vasconcelos, para el conjunto valenciano "perder es lo normal, ganar sería la hostia", entiendo la normalidad de la derrota por el salto en la clasificación. Es por eso que el Zamarat buscará un partido que esté amarrado lo antes posible, siendo la principal preocupación llegar a los últimos minutos con el marcador igualado y que sea la tranquilidad de Claret y no la necesidad del Zamarat la que se imponga.
Aun así, Vasconcelos señalaba en la rueda de prensa previa que no renunciarán a su estilo habitual, mantener una defensa férrea y desarrollar su potencial ofensivo desde abajo.
El conjunto zamorano afrontará el duelo sin poder contar con Bintou y María Barneda, además de la baja de larga duración de Vicky Llorente, recién operada de su rodilla. El entrenador portugués sí tendrá a su disposición a la nueva incorporación, la alemana Alina Wayan, aunque no es seguro que tenga minutos por su tiempo parada.
Un Recoletas Zamora que arrancará el duelo conociendo el resultado de Joventut de Badalona y, posiblemente, el de Baxi Ferrol, rivales directos en su aspiración por el ascenso como líder de la LF Challenge.
La jornada será especial para el club zamorano y es que celebrará el día de la cantera en el pabellón, donde estarán las categorías inferiores del Zamarat. Aludiendo al espíritu de club, Vasconcelos afirmaba que la motivación es mayor al tener a las jugadoras más pequeñas delante. Señalaba que la victoria de su equipo tiene que llegar "por ellas, por el club y por las más peques".
