El Ayuntamiento de Jambrina ha aprobado por unanimidad en una sesión extraordinaria de su Pleno Municipal una resolución formal de rechazo a la posible instalación de dos plantas de biogás en el municipio vecino de Peleas de Abajo. La decisión, tomada el pasado 5 de diciembre, responde a la preocupación de los vecinos de Jambrina por las repercusiones medioambientales, de salud pública y de infraestructura que dichas instalaciones podrían acarrear.
La resolución, firmada por el alcalde presidente Rafael Calvo García y la secretaria del consistorio Montserrat Linares Barcia, recoge tres motivos principales para esta oposición. En primer lugar, alerta sobre los potenciales riesgos para el medio ambiente y la salud humana debido a posibles impactos negativos en el ecosistema. En segundo lugar, subraya el deterioro que el tránsito continuo de camiones de gran tonelaje ocasionaría en las carreteras y caminos de Jambrina y los municipios colindantes, cuya infraestructura no está preparada para soportar este aumento de tráfico pesado. Finalmente, se menciona el riesgo de incidentes graves como escapes, explosiones o incendios, derivados de errores humanos o fallos técnicos, con consecuencias impredecibles.
El Ayuntamiento ha fundamentado su decisión en el artículo 45 de la Constitución Española, que insta a los poderes públicos a proteger y mejorar la calidad de vida y el medio ambiente mediante el uso racional de los recursos naturales. Esta oposición unánime refleja el descontento e incertidumbre generalizada de los habitantes de Jambrina ante un proyecto que consideran perjudicial para su entorno y calidad de vida.