El Teatro Principal de Zamora fue el escenario de una emocionante noche de música y emociones con la presentación de “Recuérdame, el Musical de Coco”, un espectáculo que ha recorrido el país y que ha dejado huella en su paso por la ciudad. Este musical, que ya había visitado Zamora en ocasiones anteriores, regresó con un formato renovado y una producción deslumbrante que ha captado la atención de más de 550.000 espectadores en sus más de cinco años de giras.

La función, que comenzó puntualmente a las 18:00 horas, presentó una duración de aproximadamente 70 minutos, en los que el público pudo sumergirse en la historia de Miguel Rivera, un niño de Santa Cecilia con el sueño de convertirse en músico. A través de sus aventuras y desafíos, el espectáculo ofreció una experiencia única que combina la tradición mexicana con un enfoque contemporáneo, resonando profundamente con la audiencia.
Bajo la dirección artística de Pedro Pomares, reconocido por su trabajo en grandes producciones como “El Fantasma de la Ópera” y “Los Miserables”, la obra mantuvo su calidad habitual, presentando un elenco excepcional que deleitó a los asistentes con sus potentes interpretaciones y conmovedoras coreografías. Las canciones icónicas de la película fueron interpretadas en riguroso directo, logrando que los espectadores se unieran en un canto colectivo que elevó el ambiente festivo del evento.

El diseño de escenografía y vestuario se destacó por su atención al detalle, recreando la atmósfera vibrante del Día de Muertos, una festividad que celebra la vida y la memoria de los seres queridos. Cada elemento visual y sonoro de “Recuérdame” contribuyó a una inmersión total en el mundo de “Coco”, haciendo que tanto los niños como los adultos se sintieran parte de la historia.
La función fue todo un éxito, con el teatro lleno al completo y una audiencia familiar que disfrutó al máximo de la experiencia. Los trabajadores del teatro estuvieron muy atentos con el público, ofreciendo cojines a los más pequeños para que pudieran ver cómodamente el espectáculo. Además, los actores de la obra se mostraron muy participativos con los asistentes, interactuando y haciendo que el público se sintiera aún más parte del espectáculo, lo que añadió un toque de cercanía y emoción a la velada.