El trabajo en Semana Santa para todo el equipo de nuestro diario ha sido duro, muy duro. Carreras, mil problemas a la hora, noches sin dormir, cientos de horas frente a los portátiles y a las cámaras, esfuerzos sobrehumanos que solo Dios sabe y que nuestras familias y amigos han visto de cerca. Pero todo ha merecido la pena. Semana Santa sí GRACIAS, este es nuestro titular para la Semana de Pasión
Arrancamos en la red hace cuatro años concretamente el 1 de octubre de 2013, y cada uno de estos en Semana Santa nos hemos roto por dar lo mejor de todos nosotros, diez días sin descanso y con la emoción contenida a veces en nuestro sentir interno, muertos de ganas de poder cargar con cualquiera de los pasos que visten nuestra Pasión, de salir en muchas de las procesiones de las que también somos cofrades. Pero siempre hemos creído que transmitir el sentimiento de la Pasión de Zamora era quizá mucho más importante que nuestra propia satisfacción.
Ayer, tras dejar al Resucitado y a su Madre en sus lugares de origen y tras el estallido de color, música, esperanza y alegría que vivimos en la Plaza Mayor, hemos hecho balance y claro que ha merecido la pena.
Volvimos a innovar con la Semana Santa en directo a través de la red social y no hemos monetizado los resultados, quizá nunca le saquemos el partido económico que hubiéramos debido, pero el orgullo de todo este equipo también está en ello, trabajamos por nuestra ciudad y provincia y lo hacemos sobre todo en Semana Santa desinteresadamente. Porque la Semana Santa de Zamora lo merece, porque nos encanta ver la ciudad llena de vida, de visitantes, de gente que elogia nuestras tradiciones y que envidia nuestra ciudad, porque somos zamoranos orgullosos, porque lo vivimos desde dentro, por todo ello, queremos darles a todos las gracias por seguirnos, por hacernos sentir orgullosos de nuestro trabajo y porque las muestras de cariño en la calle también nos emocionan y ayudan a seguir adelante.
Si cometimos algún fallo crean que nunca fue de mala fe ni con segunda intención.
Dimos lo que teníamos y quien da lo que tiene como dice el refrán no está obligado a dar más.
Gracias a todos a los hermanos de fila, cargadores, directivos, músicos, hosteleros, comerciantes, encargados de seguridad y de cuidar por todos nosotros, por hacer que la Semana Santa de Zamora siga siendo la mejor del mundo, Semana Santa, sí GRACIAS y en Zamora mucho mejor.
Ya esperamos la de 2018 con todas nuestras ganas.
