La calle Santa Clara, uno de los ejes principales de la ciudad de Zamora, será la imagen del cupón de la ONCE del próximo martes, 5 de agosto. Esta vía peatonal, repleta de vida y actividad comercial, forma parte de la serie ‘A pie de calle’, con la que la ONCE recorre las calles más representativas de 50 ciudades españolas.
Con cinco millones de cupones en circulación, la ONCE difundirá la importancia cultural, arquitectónica y económica de esta calle zamorana, que une la Plaza Mayor con el Parque de la Marina Española. Su nombre recuerda al antiguo convento de Santa Clara, que se encontraba en esta calle desde el siglo XVI y fue derribado posteriormente.
Santa Clara cruza diversas plazas como la de Fernández Duro, la de Santiago, Zorrilla, la Constitución y la de Sagasta. A lo largo del recorrido, el paseante puede admirar edificios de gran valor modernista como el Casino —obra del arquitecto Miguel Mathet Coloma en 1905— o el conocido Edificio de las Cariátides, cuyas columnas en forma de mujer sostienen los miradores superiores.
También destacan monumentos como el Palacio de los Momos, de finales del siglo XV, del que se conserva una singular fachada renacentista con elementos góticos isabelinos. Y, por supuesto, la iglesia de Santiago del Burgo, uno de los templos románicos mejor conservados de Zamora, construida entre los siglos XII y XIII y que aún mantiene su estructura original de tres naves.
Santa Clara no solo es el eje cultural de la ciudad, sino también su corazón comercial. A diario, cientos de zamoranos y visitantes recorren esta animada vía, considerada la más conocida de la capital y uno de sus principales motores económicos.
El Cupón Diario de la ONCE ofrece un premio principal de 500.000 euros al número y serie, así como múltiples premios secundarios. Se puede adquirir a través de los más de 20.600 vendedores y vendedoras de la ONCE, en la web oficial www.juegosonce.es y en establecimientos autorizados.
Con esta iniciativa, la ONCE pone en valor calles llenas de historia, vida y cultura como Santa Clara, por las que también transita la ilusión que reparten cada día sus vendedores.
