sábado. 20.04.2024
Soldador
Soldador

El sentido de la vista es el más apreciado por los ciudadanos de Castilla y León, no en vano, más del 80% de la información que recibimos entra por los ojos, algo fundamental para darnos cuenta de la importancia de trabajar en condiciones óptimas en lo que a la salud visual se refiere. Además de las cada vez más comunes profesiones en las que se fuerza la visión cercana debido al uso de dispositivos digitales, existen otros trabajos en los que resulta vital la correcta protección de toda la zona ocular para evitar posibles lesiones en los ojos.

“Es muy importante cuidar la visión en todos los aspectos, y más aún si es en el lugar de trabajo”, asegura la vicedecana del Colegio de Ópticos-Optometristas de Castilla y León (COOCYL), Ana Belén Cisneros, quien aclara que “las lesiones oculares laborales van desde simple fatiga visual hasta un trauma severo que puede ocasionar daño permanente, pérdida parcial de la visión y ceguera”.

Como explica la experta, “en el trabajo existen muchos riesgos que condicionan a sufrir problemas oculares, desde pasar horas frente a una pantalla en el caso del trabajo de oficina, hasta estar en contacto directo con materiales altamente dañinos, como fragmentos de metal, vidrios o partículas como astillas y sustancias químicas”.

¿Qué hacer ante las pantallas?

Respecto al uso de pantallas, si no se utilizan de forma adecuada, producen fatiga visual, ojo seco o visión borrosa, debido al esfuerzo continuado de acomodación y convergencia al enfocar a distancias muy cortas y a la falta parpadeo, ya que el ojo humano está diseñado para mirar de lejos.

Para evitarlo, es importante seguir unas sencillas pautas de higiene visual. Entre ellas, mantener una distancia mínima de 30 cm en el caso de móviles y tabletas y 50 cm para ordenadores o videoconsolas; contar con una correcta iluminación en las habitaciones, evitando los reflejos en la pantalla; y aplicar la regla del 20-20-20, esto es, descansar 20 segundos cada 20 minutos mirando a 20 pies de distancia (seis metros) o relajar la vista observando objetos lejanos a través de la ventana.

Asimismo, se debe ubicar el dispositivo ligeramente por debajo de la altura de los ojos, mantener una postura correcta, procurar que la pantalla esté siempre limpia, con una imagen estable y sin destellos, ajustar el brillo y el contraste, y estudiar o leer con texto negro sobre fondo blanco. También se deben adaptar los colores del monitor para que sean siempre claros y mates, y es importante configurar los caracteres y el tamaño de la fuente –que no sea muy pequeño– para facilitar la legibilidad.

Trabajos con riesgo de lesión

Por otro lado, hay sectores laborales relacionados con el uso de maquinaria, productos químicos, eléctricos, térmicos, ópticos… que requieren un cuidado especial para los ojos debido a la constante aparición de riesgos que pueden afectar a zona ocular de manera grave, temporal o permanente.

La exposición a pequeñas partículas en el ambiente de polvo, suciedad, metal o astillas de madera puede ocasionar sensación de cuerpo extraño, traumas, infecciones o dolor. En el caso del trabajo con sustancias químicas (disolventes, pinturas, líquidos calientes…) o fluidos orgánicos contaminados, si no se utilizan los adecuados elementos de protección personal, existe peligro de irritación, dolor, hemorragias o infecciones. Del mismo modo, las radiaciones por soldaduras, rayos láser u otras fuentes luminosas muy brillantes, tienen el riesgo de quemaduras a nivel de la retina o de la córnea con posible alteración posterior de la agudeza visual.

“Usar gafas de seguridad en esos ambientes de trabajo es una manera muy útil y sencilla de prevenir daño ocular o lesiones graves”, tal y como detalla Ana Belén Cisneros.

Gafas de seguridad

Al respecto, los ópticos-optometristas de Castilla y León recomiendan que se usen los siguientes tipos de gafas:

  1. Gafas con protección lateral (pantallas laterales) si trabajas en lugares con partículas, objetos o polvo que puedan entrar en los ojos.
  2. Gafas con lentes especiales que te ayudan a protegerte si se manipulan sustancias químicas.
  3. Gafas protectoras, máscaras o cascos especialmente diseñados si trabajas cerca de radiación peligrosa, como soldadura, láseres o fibra óptica.

Del mismo modo, la experta recuerda que “si se trabaja en ambientes de este tipo, es importante acudir regularmente al profesional de la visión para detectar posibles lesiones por residuos de materiales y recibir tratamiento de inmediato”.

“También es recomendable mantener la higiene de manos para disminuir el riesgo de infecciones y si se usan gafas de protección graduadas, acudir regularmente a revisiones para actualizar la graduación”, añade.

Con todo, es fundamental que tanto la empresa como el trabajador sean conscientes de los riesgos que pueden existir en el puesto de trabajo para la salud visual, y consultar con el óptico-optometrista, junto con especialistas en riesgos laborales, para desempeñar las funciones laborales en condiciones de visión óptimas.

Consejos para cuidar nuestra salud visual en el trabajo