La visión desde la localidad es desoladora: montañas envueltas en humo, un cielo teñido de rojo y la sensación de que las llamas pueden irrumpir en cualquier momento. Aún no baja por el cañón del Forcadura que podría ser la vía más rápida de llegada a la zona.
Sin embargo, la respuesta desplegada en la zona es contundente. Bomberos de Zamora, Diputación y la UME así como BRIFS han levantado un cordón de defensa en torno al pueblo con vehículos pesados y maquinaria de extinción. La UME mantiene cuatro unidades en el terreno, mientras los camiones de bomberos trabajan en turnos coordinados para blindar la localidad. “Nadie se moverá de aquí hasta que Vigo esté a salvo”, aseguran los efectivos con los que acabamos de hablar hace 5 minutos.
La jornada ha sido extremadamente complicada. Los medios aéreos no han podido actuar debido a la densidad del humo, lo que ha dificultado contener la cabeza del incendio. Aun así, los vecinos que permanecen en Vigo aseguran estar preparados para cualquier eventualidad, colaborando estrechamente con los equipos de emergencias.
La esperanza se deposita en la noche. El descenso de temperaturas y el cambio previsto en la dirección del viento hacia medianoche podrían aliviar la situación y facilitar las labores de contención. “La calma es tensa, pero estamos más tranquilos porque sabemos que los bomberos están preparados y no dejarán que el pueblo se pierda”, comentan varios residentes.
La madrugada será crucial para determinar el futuro de Vigo de Sanabria. Si las condiciones acompañan, los medios aéreos podrán incorporarse a primera hora de la mañana para reforzar un operativo que hoy, por tierra, ha resistido contra las adversidades.
Si el viento cambia o se para podría ayudar a la contención que es lo que se pretende. Librar la población es lo más importante y aunque algunas partes tienen flancos complicados ahora se está trabajando en la prevención refrescando y librando de maleza la zona más delicada. La previsión de temperatur aque podría caer hasta los 6ºC sería una gran opción y ayuda para el control y el parón del fuego que seguía desbocado en la montaña. Si se diera la inversión térmica todo sería óptimo para el control.
