El pasado mes de septiembre vecinos y veraneantes se quejaban de la presencia en el entorno del Lago de Sanabria de una manada de mastines que se acercaban a los "manteles" que los visitantes desplegaban en las zonas habilitadas y a los establecimientos hosteleros en busca de comida.
Aunque los perros parecían ser tranquilos, su presencia preocupaba a los visitantes que, a su vez, alertaban del estado lamentable de alguno de los animales. Un mes y medio después, los vecinos de la zona vuelven a dar el aviso de que los canes continúan "paseándose" por Galende en busca de comida, sin que nada se sepa de su dueño o dueños.
Algunos vecinos cuidan de la manada compuesta por unos ocho mastines y aseguran que el asunto "se arrastra" desde hace un año sin que nadie ponga remedio. Incluso subrayan que se ha avisado al Ayuntamiento de Galende y al Seprona e interpuesto denuncia ante la Guardia Civil, pero "todo sigue igual", confirma una vecina.
Según el testimonio de estos "cuidadores", algunos de los perros llevan "chip" por lo que dicen no entender porque no se localiza a los dueños y se les obliga a hacerse cargo de sus canes, antes de que ocurra una "desgracia".

Mientras, la presencia de los mastines, los mejores guardianes del ganado y que pueden llegar a pesar hasta los 90 kilos si son machos, sigue preocupando a vecinos y negocios ubicados en el entorno del Lago de Sanabria e insisten en que no entienden la razón por la que "nadie toma cartas en el asunto".