sábado. 20.04.2024
Imagen de archivo, gasolinera

La subida del valor del combustible que estamos viviendo en la última semana no deja indiferente a nadie. No se habla de otra cosa. Manifestaciones de camioneros, quejas por parte de los consumidores y los gerentes de las gasolineras con la soga al cuello ante la fuerte crecida del gasoil.

De hecho, las imágenes en las gasolineras en los últimos siete días ha sido desoladora. Carteles en los que el precio del combustible variaba en cuestión de horas y largas colas para llenar los depósitos ante una posible subida. Una imagen que se ha estado viviendo en todo el país.

Una vez más la gran subida que está sufriendo el combustible revierte en el bolsillo de los españoles, una traba más para los camioneros que se encuentran en huelga.

Melchor Casas, camionero, ha aseverado que a su trabajo le afecta considerablemente, pero también “al que está de obrero y necesita el turismo para ir a trabajar. Una situación que se ve incrementada por el coste de la luz y el gas, así como el encarecimiento de la cesta de la compra”.

De igual modo, Casas ha indicado que “la guerra no está ayudando a esta situación, pero esto es algo que ya veníamos arrastrando desde mucho antes”.

También ha lamentado el futuro que le espera a Castilla y León porque “el campo y la ganadería, junto con el transporte, ya no son viables por los altos costes de electricidad y gasoil”.

Santos Monterón, otro camionero, cree que “el gobierno nos está contando un cuento y está achacando la subida a la guerra. En 2008 el barril estaba por encima del precio al que está ahora y el gasoil costaba manos, se están llenando los bolsillos con nuestros impuestos”.

Además, ha asegurado que el petróleo no llega en su totalidad de la zona de Ucrania ya que la mayor parte es de Nigeria, México o Brasil.

“A los camioneros nos cuesta mucho. Yo, con 800 litros que llevo, me cuesta llenar el depósito del camión unos 1.500 euros, antes eran 800 euros aproximadamente. Ahora nos gastamos el dinero de más en gasoil, si tenemos algún problema con el camión estamos perdiendo dinero, de ahí vienen las huelgas”, lamentado.

Por su parte, Laurentino Hidalgo, vicepresidente de estaciones de servicio de Zamora y titular de la estación de Pereruela ha apuntillado que “es normal que suba el producto, pero tenemos un doble palo. Por un lado, el coste del mismo y, por otro, el incremento de los impuestos, al final lo sufrimos doblemente. Cada euro que sube el petróleo, nos sube otro euro de impuestos. Además, tampoco entiendo cómo se le puede aplicar el IVA a los impuestos especiales, es decir, pagamos el IVA sobre el impuesto especial de hidrocarburos; se paga el producto, se paga el impuesto y se paga el IVA”.

También ha lamentado cómo afecta esta situación a la agricultura y la ganadería agregando que “estamos en el medio rural, al campo le pasa igual. Los precios que tienen los productos no son capaces de rentabilizados, ¿cuántos kilos de cebada necesitan para pagar un litro de gasoil?”.

Ante la situación del sector ha apuntillado que “hay que trasladar el cambio de precio a los clientes o en poco tiempo nos arruinamos, hay días que hemos vendido a pérdidas. Necesitamos el dinero para volver a comprar otra cisterna".

Por ello, ha asegurado que las estaciones de servicio se mantienen en pie con “cosas paralelas, un bar, el lavadero o una tienda. Con un poco de esto y un poco de lo otro, vamos tirando”.

Gasolineras y camioneros en jaque ante el incremento del precio del combustible