viernes. 29.03.2024
Mila Pérez a las puertas de MILARTE
Mila Pérez a las puertas de MILARTE

Ha pasado apenas medio año desde que Mila Pérez vio cumplido su sueño con la apertura de MILARTE. Su propio espacio de arte es mucho más que una instalación para enseñar todas las técnicas empleadas por la artista -desde la pintura, pasando por las manualidades hasta la escultura- para convertirse en un auténtico lugar de esparcimiento para pequeños y mayores.

El negocio, ubicado en el pasaje de Olmedo, brilla ya con luz propia. Los escaparates se mudan con motivo de cualquier festividad u ocasión especial, mientras los tablones y paredes rebosan de las creaciones que cada semana van completando en forma de talleres y clases. La hora en MILARTE se ha llegado a convertir para muchos niños en su momento de esparcimiento personal y su hobbie principal por encima de los videojuegos y el mundo digital.

Sin embargo, un espacio ha aguardado durante todo este tiempo a recibir un nuevo uso. La segunda planta del local, que ha permanecido vacía desde septiembre, pasará a acoger los caballetes, lienzos, paletas y sobre todo, de inspiración. Mila considera que ceder ese espacio para quien no dispone de hueco en su propia casa animaría a muchos a retomar la pintura. “En casa muchas veces no te poner a pintar por no sacar todos los artilugios. A mí misma me ha pasado hasta que mi marido logró hacerme un taller, pero antes lo hacía en una pequeña salita en la que tenías que tener cuidado con no manchar y con montar y desmontar todo con la consecuente pérdida de tiempo y también de desgaste emocional. Muchos no lo hacen simplemente por eso”.

De hecho, la propuesta ya ha recibido el visto bueno de muchos interesados a través de sus publicaciones en la red social de Facebook, a la espera de que se traduzca finalmente en un espacio en el que los colores y las más diversas técnicas cobren vida. 

MILARTE, el espacio de arte creado por la zamorana Mila Pérez
MILARTE, el espacio de arte creado por la zamorana Mila Pérez

Mila precisa que no se trata de una clase de arte, sino de un espacio para que los zamoranos que ya cuentan con un cierto conocimiento y dominio puedan concentrarse y explayarse sin pensar en el tiempo. En todo caso, la zamorana, que completó la carrera en la Escuela de Arte y Superior de Diseño de la capital, podrá dar ciertas nociones o ayudarles en momentos puntuales, “pero no está concebida para una clase como tal”.

El nombre de MILARTE cobra así aún más sentido abriéndose a todos los zamoranos y ofreciendo un espacio de recreación en el que no sólo aprender, sino también encontrar su propio espacio con vistas al que en su día fue uno de los pasajes más concurridos de la capital y que ahora comienza a revitalizarse gracias a este negocio fruto de una trabajadora insaciable.

Un espacio donde poder crear arte