La nueva normalidad es la norma que rige en el 89% del territorio zamorano. Un total de 221 municipios se mantienen libres de riesgo frente a 27 que presentan un nivel de alerta variable en base a la incidencia semanal entre la población mayor de 65 años. Los datos más preocupantes se concentran en un puñado de municipios que se mantienen teñidos de morado.
Así esta semana a la situación que ya arrastraban Mombuey, Quintanilla del Olmo y Fresno de Sayago se suman Villaveza de Valverde y Piedrahita de Castro.
Zamora también empeora sus datos y abandona la nueva normalidad para teñirse de amarillo. Con una incidencia de 145 casos pasa a nivel de riesgo bajo, al igual que ocurre con Villaralbo (181 casos) y Galende, mientras que Alcañices no varía su situación y mantiene 236 casos semanales por cada 100.000 personas.
Otros nueve municipios mantiene por su parte una incidencia de riesgo medio como son Carbajales de Alba y Villamor de los Escuderos que se mantienen una semana más teñidos de naranja. Por su parte empeora la incidencia en Camarzana de Tera, Villanueva del Campo, Tábara, Villafáfila, Muelas del Pan y Villabuena del Puente que abandonan la nueva normalidad mientras que Fariza pasa de nivel de riesgo bajo a medio.
Por último se tiñen de rojo en la última semana los municipios de Pedralba de la Pradería, Arcos de la Polvorosa, Villaveza del Agua, Bretocino, Villarrín de Campos, Villalba de la Lampreana, Losacino y Corrales del Vino.
Buena noticia para otros territorios que han dejado atrás los avisos de riesgo por casos Covid. Es el caso de Hermisende, Robleda-Cervantes, Puebla de Sanabria, Villalpando (que a día de hoy mantiene una incidencia de 0 casos) y Vezdemarbán que se apuntan al carro de la nueva normalidad.