La segunda edición de la escuela de verano AIHUB del CSIF ha reunido en Barcelona, el pasado 3 de julio, a 120 docentes e investigadores que han explorado los retos y los riesgos de incluir y de excluir la Inteligencia Artificial (IA) de la educación.
El proyecto ha reunido un itinerario para docentes y otro para jóvenes investigadores, que han puesto en común retos y oportunidades.
Existe una doble vertiente a la hora de hablar de esta tecnología en la educación. Por un lado está la necesidad de transmitir conocimientos sobre ella al alumnado y hacerlo desde un espíritu crítico y, por otro, se encuentra su aplicación por parte de los profesores para mejorar la docencia.
Para implementar la IA en las aulas, habría que invertir más tiempo y recursos a los profesores, mayor convergencia entre educación e investigación y que los colegios se conviertan en laboratorios de investigación.
Otra de las demandas de los expertos ha sido la creación de un centro de prospección que estudie hacia dónde puede evolucionar el sistema educativo. Hay centros que se han atrevido con la tecnología", pero que son una inmensa minoría. De hecho, el que era su centro es pionero en la introducción de las nuevas tecnologías.