El presidente de EEUU, Joe Biden, junto a los líderes del G7 de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, y el Reino Unido, así como la Unión Europea anunciarán nuevas acciones económicas para responsabilizar al presidente ruso Vladimir Putin por su guerra contra Ucrania y con el objetivo de aislar aún más a Rusia del sistema financiero global. Los anuncios realizados por EEUU junto a los aliados y socios -que representan a más de la mitad de la economía mundial- incluyen la revocación del estatus de la nación más favorecida de Rusia.
Un comunicado lanzado por la Casa Blanca ha asegurado que Biden firmará hoy mismo una Orden Ejecutiva por la que pondrá fin a la exportación de artículos de lujo a cualquier persona que se encuentre en la Federación de Rusia. Esto incluirá artículos como relojes de alta gama, vehículos de lujo y otros artículos que frecuentemente comprados por las élites rusas. A su vez se prohibirá la importación de bienes a los Estados Unidos de varios sectores de la economía rusa como es el caso de mariscos, licores (vodka) y diamantes no industriales.
La firma de esta Orden Ejecutivo supondrá la pérdida para Rusia de mil millones de dólares en ingresos de exportación.
A su vez, Biden también creará la autoridad para prohibir nuevas inversiones en cualquier sector de la economía de la Federación de Rusia, estableciendo la autoridad legal para futuras restricciones a la inversión en cualquier sector de LA economía rusa.
También se impondrán sanciones de bloqueo total a Yuri Kovalchuk, ejecutivos de los bancos que hemos sancionado, y a los miembros de la Duma que patrocinaron legislación para reconocer la llamada "República Popular de Donetsk" y "República popular de Luhansk".
Desde la Casa Blanca consideran que las sanciones impuestas ya están dando sus frutos atendiendo a que hoy el valor del rublo es menor al de un penique; la bolsa rusa está cerrada por el tiempo más largo de su historia, que se suma al hecho de que la calificación crediticia de Rusia es ahora estado de "basura" o especulativo sin grado de inversión.