jueves. 28.03.2024
/images/miranda_do_douro_frontera_noche__43.jpg
/images/miranda_do_douro_frontera_noche__43.jpg

La declaración por parte del Gobierno luso del estado de calamidad y la imposición de restricciones para intentar frenar la nueva ola de Covid que vuelve a asolar al país llega marcado por las dudas, especialmente para los trabajadores transfronterizos, que ya se han visto afectados en dos ocasiones anteriores por los controles o cierres de las fronteras. 

Y es que la resolución del Consejo de Ministros luso n.º 157/2021 no especifica excepción alguna para los trabajadores transfronterizos, como tampoco figura en el Consulado General de España en Portugal. Por tierra se eximen de la realización de test a los menores de 12 años así como a los trabajadores transfronterizos, entendiéndose estos como aquellos que "ejercen su actividad profesional regular a hasta 30 kilómetros de la frontera". Estos por lo tanto estarán eximidos de presentar certificado Covid alguno o prueba negativa, al igual que los menores de 12 años, pero no los que trabajen en un radio más lejano, como por ejemplo los portugueses que se encuentren en la capital a los que siguiendo la norma al pie de la letra, se les podría exigir. 

En su caso será necesaria la presentación de un certificado Covid, certificado digital de recuperación -para aquellos que pasaran el Covid hace menos de seis meses- o de un test negativo (son válidas las PCR realizadas en las 72 horas previas y los test de antígenos en las 48 horas previas). Un punto que queda por reivindicar, ya que ACIMD - Associação Comercial e Industrial do Concelho de Miranda do Douro ya ha remitido un escrito al primer ministro luso para pedir que se amplíe ese radio a 100 kilómetros. 

Este cambio de criterio llega tras las dudas planteadas por las entidades de cooperación transfronterizas para que los trabajadores de uno y otro lado del Duero entraran dentro de las excepciones previstas y no tengan así que enfrentarse a un desembolso importante de dinero para la realización de dichos test dentro de las restricciones terrestres previstas entre el 1 de diciembre y el 9 de enero. De esta forma, las entidades buscaban evitar más perjuicios para estos trabajadores a los que ya se les puso trabas en los anteriores cierres de frontera con largas colas e importantes rodeos ante el cierre de ciertos puntos (como fue el caso de Miranda). 

De esta manera, si bien en un principio no se han establecido controles fronterizos fijos, sí podrán realizarse de manera intermitente y solicitarlos a aquellos que quieran acceder al país. 

La rectificación permite además a los españoles cruzar la frontera con Portugal siempre y cuando se presente el Certificado Covid que avale que cuenta con la pauta completa de vacunación, lo que supone un alivio para los municipios de la Raia que viven en gran parte del turismo de los españoles más apegados a la zona del Duero. 

Las multas por incumplir alguna de estas medidas oscilan de los 300 y 800 euros y deberán someterse a las pruebas que les dicten las autoridades en ese momento. 

Dudas entre los trabajadores transfronterizos ante las nuevas restricciones de acceso