ASUFIN ha enviado una carta a todos y cada uno de los 10 Grupos parlamentarios, desde el Socialista hasta el Mixto, para instarles a plantear en el Congreso y apoyar una Ley que convierta todos los terrenos arrasados por el volcán de Cumbre Vieja, en La Palma, en un Parque Nacional, como una solución real para que los habitantes de esas zonas puedan empezar de cero.
“La creación de un Parque Nacional permitirá un plan global para poner en marcha una reordenación del territorio acompañada de un mapa de riesgos. De esta manera, las familias canarias podrán empezar de cero en un espacio seguro, además de evitar el desarraigo”, justifica la misiva firmada por Patricia Suárez, presidenta de ASUFIN.
“La creación de Parque Nacional debe ser aprobada por Ley en el Congreso. Es por ello que la participación de su grupo es fundamental. Los palmeros y palmeras merecen la solidaridad de todos sus compatriotas”, remacha.
Se explica que el recorrido que ha hecho la lava del Cumbre Vieja por lo que antes eran cultivos, viviendas, barrios y negocios ha dejado tras de sí la más absoluta desolación: terrenos absolutamente impracticables para rehacer vida y actividad económica.
Otra de las razones que se exponen es que la mayor parte de los propietarios en las Islas Canarias no disponen de un seguro contratado, el 55% según los últimos datos recopilados por la patronal UNESPA (datos de 2020), que los deja en situación de desprotección y absolutamente al margen de la cobertura que gestionará el Consorcio de Compensación de Seguros.
Además, la figura del Parque Nacional, de competencia estatal, no incompatible con la propiedad privada de aquéllos que hayan visto salvadas sus tierras. Pero al mismo tiempo la ley permite expropiar a los afectados y reconocer un precio indemnizatorio, lo que conocemos como justiprecio. De lo contrario, y con la legislación de expropiación forzosa ordinaria, el terreno no tiene ningún valor puesto que se ha convertido en lo que se denomina el malpaís.