Nicolás Maduro ha jurado como presidente de Venezuela para el período 2025-2031 en un acto celebrado ante la Asamblea Nacional controlada por el oficialismo, en medio de fuertes críticas de la oposición y rechazo internacional. La ceremonia se llevó a cabo un día después de la breve detención de la líder opositora María Corina Machado, quien fue liberada tras permanecer retenida por agentes encapuchados.
La oposición venezolana, encabezada por Edmundo González Urrutia, insiste en que los comicios del pasado 28 de julio fueron fraudulentos y reivindica la victoria del exiliado político, quien actualmente reside en Panamá. Mientras tanto, desde Washington, Estados Unidos ha instado a reconocer a González como el legítimo presidente, intensificando las tensiones en el país sudamericano.
La líder opositora fue interceptada en la zona de Chacao, Caracas, mientras participaba en una manifestación en contra de la investidura de Maduro. Según un comunicado difundido por su equipo de campaña, Machado fue obligada a grabar vídeos durante su retención, aunque no se han divulgado detalles sobre el contenido de los mismos ni las condiciones de su liberación.
El incidente ha generado críticas dentro y fuera del país, al considerarse un nuevo ejemplo de la represión ejercida por el Gobierno chavista contra sus opositores. En respuesta, Machado ha anunciado que dará declaraciones este jueves a las 19:00 horas, donde se espera que aborde tanto su detención como la situación política en Venezuela.
El clima de tensión ha sido palpable en las calles de Caracas, donde la oposición convocó manifestaciones para exigir respeto a la voluntad popular y la liberación de presos políticos. Estas movilizaciones se extendieron a ciudades de otros países, como Madrid, donde cientos de venezolanos se concentraron en la Puerta del Sol en apoyo a González.
La protesta en la capital española contó con la presencia de figuras destacadas de la política española, entre ellas los expresidentes José María Aznar y Mariano Rajoy, así como Santiago Abascal, líder de Vox. Los asistentes corearon consignas contra el régimen de Maduro y denunciaron el "fraude electoral".
A pocas horas de asumir oficialmente su tercer mandato, el Gobierno de Maduro ha reforzado la seguridad en todo el país, desplegando más de 1.200 agentes y estableciendo controles estrictos en las fronteras. Aunque las tensiones han escalado, Maduro insiste en la legitimidad de su Gobierno, pese a las dudas que persisten sobre la transparencia de las elecciones.
