viernes. 29.03.2024

José Aznar, el psicoterapeuta que atiende gratis desde hace 30 años: "Nunca he calculado el dinero que he perdido pero si el bienestar que he logrado"

Este médico de 72 años hizo parada en Zamora antes de viajar a Salamanca para presentar su libro, "El ser y el ego", en el que relata sus vivencias desde que heredó un negocio que le permite pasar consulta sin cobrar nada a sus pacientes

Su mensaje es que se pueden superar el miedo. la tristeza o la rabia y asegura que "quererse a uno mismo es lo más difícil que hay en la vida"

José Aznar en Zamora
José Aznar en Zamora

Recorre León, Zamora y Salamanca para presentar su libro "El ser y el ego. Un Camino hacia la luz", una recopilación de sus experiencias personales a través de la consulta de un psicoterapeuta muy particular. Él es José Aznar, un barcelonés de 72 años, con 30 años de profesión a sus espaldas, un trabajo que ejerce de forma altruista desde hace tres décadas, simplemente, porque "no necesito el dinero para vivir".

Relata con toda naturalidad que heredó de su madre un garaje y una gasolinera mientras trabajaba en el Hospital Clínico de Barcelona como psiquiatra. Dejó la rama sanitaria para "poner a punto" los coches, pero pronto descubrió que aquello no era lo suyo. "Me di cuenta de que lo me gustaba era la psicoterapia", un proceso por el que él mismo pasó de joven para "conocerme" mientras estudiaba Medicina. Y se fue al psicoanalista porque, como todos, "notaba unos miedos, una rabia, una tristeza... unas veces me creía inferior, otras el rey del mambo", cuenta, para agregar que hizo diferentes terapias.

Y con todo este bagaje decidió profundizar más en la especialidad y dejó en manos de un gestor aquel negocio que su madre le donó en vida. "Me dije a mí mismo ¿a ti te hace falta el dinero?. Pues no, no lo necesitaba y decidí abrir una consulta y atender a los pacientes de forma gratuita", aclara.

-¿Y calcula cuánto dinero ha dejado de ingresar en estos 30 años?

-Yo lo que he calculado es el bienestar que he logrado tener. Cuando das algo porque uno quiere a cambio de nada, te sientes muy bien. El camino no es "te doy para tener". Es muy terapéutico cuando un paciente se "desnuda" ante ti, te da su confianza, hay que ser muy valiente para hacerlo y yo lo valoro. Aprendo de ellos, yo les comunico mi experiencia, es algo mutuo y a mí me hace bien.

De sus años de experiencia ha concluido que la psicoterapia requiere presencialidad y, por ello, se aparta de la consulta online aunque descuelga el teléfono en cuanto recibe la llamada de alguno de sus pacientes.

-¿Imagino que tendrá la consulta llena o atiende solo a personas con pocos ingresos?

-Si tengo mucho trabajo, pero distribuyo a los pacientes de tal manera que también tenga tiempo para mí, para mi disfrute. Atiendo a todo el mundo. Tengo pacientes cuya economía no va bien y otros bien situados que me han visto en las redes sociales o en los medios comunicación y creen que les puedo ayudar. Nunca pregunto sobre ese asunto.

-¿Son más felices los pobres o los ricos?

-La felicidad la da el conocerse a uno mismo. Nada tiene que ver lo material.

Se siente privilegiado y se define como un "trabajador" nato, un guerrero pacífico y creyente de un "universo inteligente". "Cada uno que lo llame como quiera: Dios, energía, estrellas", subraya.

Su mensaje es que se pueden superar el miedo. la tristeza, la rabia, la culpa, el orgullo, la queja, el juez interior o la salvadora interior... "esos personajes que todos tenemos", asegura.

La ruta por Castilla y León desde Barcelona comenzó en León con un par de entrevistas para recalar en Zamora, ciudad en la que estuvo hace años y a la que ha querido volver porque "me gustó mucho". Su próxima parada será Salamanca.

Durante su estancia en la capital zamorana, alojado en el Hotel ARES, José Aznar habló de su libro, un trabajo que recoge su vida pero en el que también perfila las pautas necesarias para perder los miedos que aquejan a esta sociedad. "Tenemos que aprender a observarnos", afirma. "No somos negatividad, somos alegría, amor, valentía, poderío, confianza, fortaleza. Es una locura lo que tenemos dentro", recalca.

-¿Y por qué somos tan infelices?

-Ya desde pequeños nos montamos en el ego, en la negatividad. No son más que pensamientos y emociones que no confrontamos con la realidad. Nos lo creemos, nos identificamos con ellos y hacemos de ellos una identidad falsa que, desde el inconsciente, nos dirige la vida.

-¿Nos educan entonces para ser infelices?

-No, ya nos montamos nosotros esa manera loca de pensar y sentir. Al no confrontar la realidad, nos lo creemos. Cuando nuestros padres nos riñen a veces pensamos que no nos quieren, que somos malos, pero el enemigo no son los padres, ni la pareja.... El enemigo lo tenemos dentro.

-¿Reconozca que con la guerra de Ucrania, la pandemia, el incremento de las desigualdades... no es fácil ser feliz ni estar cuerdo?

-Si, pero los locos somos todos. Algunos están un poco más y llegan a la psicopatía. Hitler, Stalin y ahora Putin tenían esa negatividad, el problema es que llegan a presidir naciones. La maldad y la negatividad están en todos nosotros y debemos poder observarla para poder cambiarla. Si  miramos al otro con más empatía, veremos lo negativo, claro, pero también lo positivo. Y también nos veríamos a nosotros mismos. Pero cuesta.

José Aznar, en el hotel donde se alojó durante su estancia en Zamora
José Aznar, en el hotel donde se alojó durante su estancia en Zamora

-Cuesta ver con cierta positividad a determinados personajes...

-Si, pero sobre todo cuesta verse a uno mismo. El ego es un juez interior que está ahí intentando derribarte, pero nos hemos identificado con ese juez y acusas a los demás. Y lo juzgas. Yo solo intento que la gente abra los ojos.

-¿En España sigue siendo casi de "locos" acudir al psicoterapeuta?

-Cada vez menos y la pandemia ha contribuido a normalizarlo. En estos dos años hemos estado más tristes, más cabreados, más solos, con más miedos...La gente cuando sufre es cuando pide ayude. La pandemia ha hecho visible esa negatividad que tenemos, pero todos somos maravillosos y la vida nos quiere igual.

-¿Qué pautas debemos seguir para ser más felices?

-Aceptar con paz las cosas nos ayuda a crecer. La tristeza nos lleva a la dependencia emocional, nos hacemos daño. En lugar de rabia, asertividad, hacer valer nuestra posición de manera firme pero con comprensión, sin juzgar al otro. Quererse a uno mismo es lo más difícil que hay en la vida. Cuesta, pero la ayuda de otra persona te facilita ese descubrimiento. Descubrir quien eres te permite desechar al que no eres. El proceso de psicoterapia lleva mucho tiempo y es duro pero ayuda a debilitar el ego para encontrar la felicidad y el bienestar que está dentro de cada uno, no fuera. Buscamos cosas y personas que llenen un vacío que no existe. Hay que liberarse de ese impostor que todos llevamos dentro.

-¿Se está mejor solo o acompañado?

-Cambiar interiormente es lo más difícil que hay, pero cuando lo logras encuentras la paz. Se está bien solo y se está bien acompañado, pero ya no eres dependiente de nada ni de nadie.

-¿Tiene miedo a la muerte o al dolor?

-No hay que tener miedo a nada. Cuesta quitarse al cobarde que llevamos dentro.

José Aznar, el psicoterapeuta que atiende gratis desde hace 30 años: "Nunca he...