Unas doscientas personas acuden a la bendición del nuevo local de la Cofradía más antigua de Zamora
Cofrades, autoridades y directivos de las distintas cofradías asistieron a la bendición de la casa de hermandad de la Cofradía de la Vera Cruz. Ubicada en la ronda de Santa María la Nueva, la casa servirá para acoger distintos enseres, así como para reuniones y para la organización de actividades culturales, a fin de potenciar la vida de la hermandad.
El capellán de la cofradía, Florentino Pérez, fue el encargado del rito de la bendición en sustitución del obispo, monseñor Gregorio Martínez Sacristán, quien disculpó su ausencia por una indisposición, al tiempo que transmitió a los cofrades su deseo de acompañarles en el acto. Además, estuvieron presentes los anteriores capellanes, como don Casimiro y Narciso Lorenzo, así como el presidente de la Junta pro Semana Santa, Antonio Martín Alén.
Con 120 metros cuadrados en una sola planta, la casa de hermandad consta de un almacén, una sala amplia y un pequeño despacho, donde se ejercerán las labores de secretaría de la hermandad. Según indicaba el presidente, Chano Lorenzo, el objetivo de la cofradía es incorporar un proyector a la sala, así como un servicio de biblioteca y de fonoteca.
La sala polivalente está decorada con fotos en color de las imágenes que desfilan en la Cofradía, así como otras vinculadas que ya no desfilan, como el Cristo de la Laguna, o la imagen de San Miguel, en cuya capilla recibe culto el Nazareno de la Vera Cruz, en la iglesia de San Juan.
También decora la sala una colección de fotografías de 1903, que recogen en blanco y negro la Semana Santa de principios del siglo XX. Junto a estas piezas, un lienzo de Solana, cedido por el Museo, muestra una noche de procesión. También está presente una reproducción de un dibujo de Antonio Pedrero que muestra los dos pasos más antiguos de la cofradía, como son la Oración en el Huerto de los Olivos y La Flagelación (el popular "Calvito") a su paso por la Plaza Mayor.
Además, en la nueva casa de hermandad de exhibe el documento más antiguo de la cofradía, de 1503, así como diversas medallas y enseres en una vitrina, junto a una representación de la Cruz.
Finalizado el acto de la bendición, la directiva repartió una medalla conmemorativa entre los colaboradores que han ayudado a restaurar la casa de hermandad. Una casa que la cofradía adquirió hace dos años por valor de 102.000 euros, a los que hay que sumar cerca de 30.000 en materiales. La mano de obra ha sido en su mayoría gracias a la colaboración de voluntarios, que han trababado desinteresadamente en el local.
El presidente de la Cofradía, Chano Lorenzo Sevillano, tuvo palabras de agradecimiento para todos ellos en un emocionado discurso en el que recordó la vida de hermandad en la antigua sede, una dependencia aneja a la iglesia de San Juan, que fue punto de encuentro de los hermanos hasta su desaparición para dejar la iglesia exenta.
Finalizado el acto protocolario, los asistentes fueron invitados a un pequeño convite por parte de la cofradía.