jueves. 07.12.2023
Vista aérea del centro penitenciario de Burgos
Vista aérea del centro penitenciario de Burgos

La Guardia Civil está investigando a un burgalés de 50 años por tenencia de pornografía infantil y contra la intimidad, tras intervenirle un teléfono móvil con material y cámaras ocultas en su propio domicilio para grabar a su mujer e hijos en el baño y el dormitorio principal.

La operación "Spycam" ha destapado la existencia de 230 vídeos y 949 fotogramas en el dispositivo móvil del investigado con imágenes íntimas de cuatro personas. Un descubrimiento que llega por casualidad, tras la detención de dos personas por un delito de tráfico de drogas, ha sido en el estudio de uno de los teléfonos intervenidos cuando se han localizado imágenes "robados" en las que aparecía una mujer y tres menores.

La gravedad de estos hechos obligó a los investigadores a solicitar una autorización judicial para analizarlas al tratarse de un delito que nada tenía que ver con el inicial sobre tráfico de drogas. Y es que, los ángulos de grabación han demostrado la ubicación estratégica de las cámaras que el investigado quitaba a discreción de él mismo. En total, se han recuperado 158 imágenes en el baño y 72 en el dormitorio principal así como 949 fotogramas de las capturas de las filmaciones.

El varón se encuentra en el Centro Penitenciario de Burgos por tráfico de drogas, sin embargo, ahora se encuentra investigado como autor de tenencia de pornografía infantil y delito contra la intimidad. Tras un ingreso en su domicilio de Madrid, se ha encontrado una gran variedad de dispositivos informáticos y tecnológicos para grabación, dos ordenadores, dos tablets, un disco duro externo, cuatro cámaras, una webcam, dos drones, tres móviles y varios cd-rom.

Investigado un burgalés por tener cámaras ocultas para tomar imágenes "íntimas" de su...