El vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, habló sobre la moción de censura que prepara el líder de la oposición, Luis Tudanca, y le espetó que "ningún procurador de Ciudadanos se apellida Tamayo", en referencia a la votación celebrada el 30 de junio de 2003 en la Asamblea de la Comunidad de Madrid, en la que dos parlamentarios electos del PSOE (Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez) impidieron con su abstención en la segunda votación de investidura la elección del socialista Rafael Simancas.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Francisco Igea acusó al secretario regional del PSOE de "querer comprar voluntades, es la vieja política que refleja el grado de desesperación del señor Tudanca". Calificó la actuación de Tudanca de "indigna", aunque aseguró que pensaba que era una persona "sensata, coherente y hasta decente".
Igualmente, arremetió contra Tudanca por no haberse "levantado" ante la política de pactos de su partido, como hizo él en Ciudadanos, de manera que consideró que su situación de "desesperación" se debe a su "cobardía" por no cuestionar las alianzas del PSOE.
Tudanca ha reiterado que mantienen contactos con Ciudadanos sobre la moción de censura pero Igea lo desmiente y dice no saber "con quién está hablando". Además, acusó al líder socialista "está intentando comprar las voluntades de los procuradores. Esto no se veía desde hace años. Lo que no sabe es que en Ciudadanos no hay un solo señor que se apellide Tamayo y hay doce personas que tienen moral y decencia", zanjó.