El Gobierno central ha anunciado que interpondrá un recurso ante el Tribunal Supremo contra el acuerdo de Castilla y León de adelantar de las 22:00 a las 20:00 horas el toque de queda, una decisión que no comparte la Junta presidida por Alfonso Fernández Mañueco y que, por el momento, mantiene tras su entrada en vigor este sábado con la publicación de la orden pertinente en el BOBYL.
El Ejecutivo toma esta decisión tras varios toques de atención y al considerar que dicha regulación vulnera el decreto del estado de alarma, cuyas restricciones de movilidad se deben mover entre la horquilla de las 22.00 y las 7.00 horas.
"Al fijar como hora de comienzo de la limitación las 20.00 horas, el acuerdo infringe nítidamente la regulación mencionada", destaca en un comunicado emitido por el Ministerio de la Presidencia.
"Se trata, en consecuencia, de una restricción de un derecho fundamental que no está amparada por el instrumento jurídico del estado de alarma", añade.
La Junta de Castilla y León lamenta que con este anuncio el Ejecutivo "trate de obstaculizar" una acción autonómica que "tiene como único objetivo proteger la vida y la salud de las personas, y reducir lo más posible el daño a la economía".
El Gobierno autonómico mantiene así por el momento el adelanto del toque de queda a las 20:00 horas en un momento en el que la incidencia acumulada se ha multiplicado por cinco desde el 1 de enero y el número de ingresados por covid se ha duplicado.
La Junta ha reiterado, previa consulta a sus Servicios Jurídicos, que el adelanto del toque de queda "está amparado" por la prórroga del estado de alarma, al permitir a las autonomías modular, flexibilizar y suspender las medidas relativas a las restricciones de movilidad.
