La Subdelegación del Gobierno en Zamora ha convocado este martes un minuto de silencio en señal de duelo y repulsa por el asesinato de una mujer de 49 años en La Coruña, víctima de violencia de género. Con este nuevo caso, son ya 14 las mujeres asesinadas en lo que va de 2025 en España a manos de sus parejas o exparejas.
Durante el acto, el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, condenó rotundamente este nuevo crimen machista y quiso recordar que, de los 14 asesinatos registrados este año, 11 no contaban con denuncia previa. Además, tres de los casos se produjeron en contextos de ruptura o separación, un momento que —según señaló— representa un alto riesgo para las víctimas. "Una de cada cuatro condenas por violencia de género tiene su origen en procesos de separación", explicó.
Blanco también trasladó sus condolencias a la familia y al entorno de la mujer asesinada, al tiempo que hizo un llamamiento a la implicación ciudadana: “Luchar contra la violencia de género es un deber colectivo. No solo deben denunciar las víctimas; cualquier zamorano o zamorana que detecte una situación debe actuar”, declaró. Recordó la importancia del 016, así como los teléfonos de emergencia 091, 062 y 112, y la utilidad de la aplicación Alercops, que permite enviar alertas con geolocalización a las fuerzas de seguridad.
La intervención se tornó aún más preocupante cuando Blanco reveló que esta misma madrugada se habían producido dos nuevos casos de violencia de género en la provincia, con resultado de detención de los presuntos agresores. Estos nuevos casos se suman a los ya existentes en el sistema VioGén, que actualmente cuenta con 285 mujeres registradas, de las cuales cinco están catalogadas como casos de riesgo alto y una fue clasificada como riesgo extremo.
Solo en lo que va de semana, se han incorporado 11 nuevos casos al sistema, lo que ha derivado en nueve detenciones. Además, cinco mujeres han recibido el alta, tras cesar la situación de riesgo. Las situaciones denunciadas son variadas: desde vejaciones y amenazas hasta agresiones físicas y psicológicas, incluyendo quebrantamientos de condena, presencia de menores y casos de agresores reincidentes.
El subdelegado volvió a agradecer públicamente la labor de la Policía Nacional, la Guardia Civil, así como la colaboración de las policías locales de Zamora, Toro y Benavente, destacando su profesionalidad y sensibilidad. Asimismo, valoró positivamente la creciente colaboración ciudadana, ya que cada vez más personas del entorno de las víctimas se atreven a dar el paso y denunciar.
A pesar de los recursos disponibles y del esfuerzo institucional, Blanco reconoció con preocupación que en Zamora “los números siguen aumentando cada semana” y que existen “riesgos evidentes”. “Zamora es una provincia pequeña, pero el goteo de casos es constante”, concluyó.
