Como si de una liturgia paralela a la Romería de la Virgen de la Concha se tratase, el Grupo Municipal del Partido Popular ha vuelto a alzar la voz para exigir al Ayuntamiento de Zamora la limpieza y el desbroce del entorno de la Cruz del Rey Don Sancho, enclavada en el camino hacia La Hiniesta. El monumento, uno de los más antiguos y simbólicos de la ciudad, permanece —según denuncian— cubierto de maleza y en un estado de abandono que contrasta con su relevancia histórica y espiritual.
Cada lunes de Pentecostés, los romeros que acompañan a la patrona de Zamora realizan una parada en este punto emblemático. Y cada año, como si fuese parte del ritual, el PP presenta la misma reclamación: la adecuación del entorno para garantizar la dignidad del paso de la Virgen y la seguridad de los peregrinos.
"Ya es casi una tradición más", ironizan desde el grupo popular, que recuerda que esta petición ha sido atendida puntualmente cada año por el Consistorio, aunque siempre de manera temporal y sin un plan de conservación a largo plazo. La verdadera crítica, sin embargo, apunta más alto: el incumplimiento, según el PP, del compromiso adquirido por el alcalde en abril de 2024.
Entonces, el Pleno aprobó una moción del Partido Popular para encargar un proyecto de puesta en valor de la zona, con el objetivo de convertirla en un espacio de disfrute para los zamoranos y de difusión del legado histórico de la ciudad. “Ha pasado más de un año y no sabemos nada de ese proyecto. El entorno sigue exactamente igual: cubierto por ramas, con la cruz oculta entre la vegetación, y con el único paso de los valientes peregrinos de la Vía de la Plata”, denuncian los ediles populares.
La formación conservadora interpelará de nuevo al alcalde en el próximo pleno municipal, previsto para el jueves, con la intención de obtener respuestas concretas sobre el futuro de este enclave patrimonial.
