El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez Quiñones, presentó este martes el balance anual del servicio de emergencias 1-1-2 de Castilla y León. Durante 2024, el centro de emergencias gestionó un total de 334.198 incidentes en toda la comunidad, lo que supone un incremento del 4,7 % respecto a 2023.
En Zamora, el 1-1-2 coordinó 22.492 emergencias, representando el 6,8 % del total regional. Entre las más habituales se encuentran las asistencias sanitarias, tanto en domicilios como en la vía pública, y los accidentes de tráfico sin heridos, que marcaron buena parte de la actividad del servicio en la provincia.
Además, se registró un incremento notable en incidentes relacionados con fenómenos meteorológicos, especialmente las emergencias por precipitaciones de nieve, que pasaron de 464 en 2023 a 720 en 2024, un aumento del 55 %. Asimismo, los rescates de montaña crecieron un 21 %, pasando de 171 a 207 intervenciones en toda la comunidad.
El 1-1-2 también registró un repunte en las emergencias de seguridad, como peleas y agresiones, que subieron un 6 %, así como un incremento del 7,3 % en los accidentes de tráfico, con un total de 23.414 incidentes en Castilla y León.
En cuanto a la distribución de avisos por tipo de intervención, el 57,9 % del total se dirigió a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a las Policías Locales, mientras que el 32,6 % fueron para la Gerencia de Emergencias Sanitarias de Sacyl. Por su parte, los servicios de extinción de incendios y salvamento intervinieron en 22.836 ocasiones, lo que supone el 4,5 % del total.
El tiempo medio de respuesta del servicio fue de 5,38 segundos para atender las llamadas, mientras que la gestión completa de cada emergencia se realizó en 70,14 segundos de media.
El día más activo del año fue el 10 de agosto, cuando el centro atendió 3.526 llamadas, mientras que el día más tranquilo fue el 5 de marzo, con 1.550 llamadas gestionadas.