La Escuela de Folclore de Zamora abre sus puertas el 5 de octubre en una nueva sede: las aulas se traslarán del Colegio San José de Calasanz al antiguo Palacio de la Diputación Provincial accediendo por la calle Alfonso XII. Para el nuevo curso se habilitarán cinco aulas más la llamada aula Covid y se ampliarán los horarios de clase.
El presidente del Consorcio de Fomento Musical, del que dependen 10 escuelas de folclore de la provincia, Jesús María Prada, anunció los cambios a una sede que permitirá desdoblar grupos de alumnos para cumplir con los ratios que marcan las medidas preventivas para contener la pandemia.
El gerente del Consorcio, Pablo Madrid, especificó que no habrá más de 10 alumnos por aula, excepto la dedicada a la de pandero y pandereta, la más masificada, pero que tiene unas dimensiones suficientes para ampliar aforo.
Madrid adelantó que tanto la entrada como la salida de los alumnos se realizará de forma escalonada, con control de temperatura y desinfección sistemática de las aulas durante el horario lectivo. Asimismo, entre clase y clase se desinfectará los instrumentos que se utilicen.
Como novedades, si hay alumnos suficientes, habrá clases de iniciación al folclore para niños de entre 5 y 6 años, y un curso de rabel, el instrumento que aún pervive en localidades como Porto de Sanabria.
El plazo de matrícula está abierto desde hoy y hasta el 24 de septiembre por el sistema de cita previa en el teléfono 980 534706 y el coste será de 112 euros. El horario establecido en un principio será de 18 horas de la tarde a las 10 de la noche, con posibilidades de ampliarlo si hay demanda.
El año pasado el Consorcio de Fomento Musical registró 1.022 matrículas, la mayor parte en Aliste, 296 alumnos, y Zamora, con 259.