La empresa habrá de cambiar las tres calderas, lo que supondrá otro retraso en la apertura de la piscina. Aun así, el alcalde asegura que «no será una demora importante»
A primera hora de la mañana Francisco Guarido actualizaba su muro de Facebook con un breve comentario sobre lo acontecido ayer sobre las 4 de la tarde en la piscina Sindical, cuando se produjo un fuego en las calderas que ha provocado un nuevo retraso en la apertura de las instalaciones. En el texto el alcalde reflejaba lo siguiente: «No queremos pensar en otra cosa que no sea un hecho fortuito, en un fatal accidente, un azar insoportable». Esta mañana, atendiendo a los medios de comunicación, repetía que «nosotros como equipo de gobierno no hemos barajado el sabotaje. No podemos ni imaginarnos que haya sido una situación de ese tipo». Apuntó que el error ha debido producirse por una «mala instalación» o un «producto defectuoso» que ha podido generar un cortocircuito en las calderas.
Guarido ha informado de la «buena disposición» por parte de la empresa encargada para resolver la situación. Habrán de sustituirse las tres calderas de la piscina, si bien ha añadido que no se producirá «una demora importante», ya que el fabricante es de Burgos y se espera tenga producto en stock.
Para conocer el causante del fuego habrá que esperar a los informes periciales, si bien ya han acudido los técnicos del Ayuntamiento para realizar un amplio reportaje fotográfico sobre el estado de la maquinaria.
El comunicado de Guarido finaliza pidiendo «paciencia», «disculpas» y «comprensión» a los ciudadanos por los acontecimientos.
