El grito de la hostelería: "Queremos sobrevivir para formar parte del futuro" y "Queremos trabajar para poder pagar" han sido las consignas más escuchadas esta mañana de jueves en la Plaza de la Constitución de Zamora
Los hosteleros de Zamora salieron a la calle y abarrotaron la Plaza de la Constitución para exigir compensaciones por el cierre decretado por la Junta de Castilla y León. "Queremos trabajar para poder pagar" fue el grito unánime de un sector que se siente "demonizado" a pesar de que el índice de contagios en la hostelería no llega al 3%.
"Queremos sobrevivir y formar parte del futuro", clamaba Óscar Somoza, presidente de Azehos, mientras los manifestantes pedían más acción y unidad. No estaban solos. Hosteleros de Benavente y Sanabria, entre ellos los dueños del Ermitaño y Cecilio Lera, comerciantes y ciudadanos de a pie apoyaban con pancartas, cazuelas y hasta cencerros las reivindicaciones de un colectivo que pone en movimientos otros sectores productivos de la provincia, como los ganaderos o los distribuidores de bebidas. "Si no hay hostelería, ¿quién va a repartir"?, se preguntaba un ciudadano que acudió a apoyar a los hosteleros.
Una pancarta con el lema "No somos una amenaza, ¡Somos parte de la solución!" presidía la concentración en la que una hostelera tomó la palabra para exigir también "explicaciones" a las administraciones por el cierre porque "nuestros hijos están sufriendo al vernos sufrir por no poder trabajar".
Decenas de hosteleros conocidos por todos y muchos particulares, como el carismático Luis Pablos, pedían en la Plaza de la Constitución poder tomarse un café un bocadillo o una tapa en los bares que tanto están sufriendo desde marzo y que mantienen una agonía tremenda a parte de una gran inseguridad. Solo el 2,9% de los contagios se han producido en bares, nada que ver con lo que ocurre en Universidades y colegios donde la tasa es infinitamente mayor.
El vocal de la Asociación de Ocio Nocturno, Óscar Calzada, reclamó altavoz en mano "más unidad" para que "no nos tomen el pelo" y afirmó que "aún estamos esperando que desde la Junta nos den una explicación que justifique el cierre". "No veo unidad", reiteró Calzada en respuesta al grito de un manifestante que pedía "más acción y menos manifiestos". Antes de concluir su intervención, Calzada animó al colectivo a salir a la calle "todos los días".
Mientras, los manifestantes no dejaban de corear consignas: "Ayudaste al banquero, ayuda al hostelero" "Más patatas bravas y menos políticos" "Mi café ¿pa cuando?" !Qué nos oigan en Madrid" o "Se alquila: bares y restaurantes" paa dejar claro que "la Hostelería Somos Todos".
