Los examinadores de la Jefatura de Tráfico de Zamora, acompañados por el resto de los compañeros, convocaron una concentración silenciosa, de 5 minutos como repulsa a la agresión sufrida por un examinador de Barcelona el pasado día 10.
El suceso se produjo en Vilafranca del Penedés cuando un alumno, después de haber suspendido el examen práctico para obtener el permiso de conducir esperó al examinador para recriminarle, aunque la discusión acabó en agresión.
Al parecer, y según publicó Marca, el alumno, sin mediar más palabras, le propinó un puñetazo en la cara al funcionario, tirándolo al suelo y provocándole una fuerte hemorragia en la nariz, rotura del tabique nasal y, latigazo cervical.