Llegó el día esperado tras un trimestre largo y distinto al de otros cursos escolares. Las vacaciones de Navidad vacía hoy colegios e institutos hasta el próximo 10 de enero, fecha prevista en Castilla y León para reiniciar las clases.
El inicio del curso escolar ha sido el más atípico que se recuerda. El coronavirus obligó a la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León a establecer unas medidas sanitarias y de distanciamiento que provocó, en un principio, el "caos" en muchos centros educativos, que tuvieron que adaptarse a un curso marcado por la pandemia con la instalación de un aula COVID, la colocación de gel hidroalcohólico en varias estancias y la separación de las mesas ocupadas por los alumnos.
El frío ha sido el compañero de la mayoría de los alumnos de Zamora. La ventilación parece ser uno de los mejores métodos para espantar la COVID-19 y todas las aulas debían ventilarse varias horas al día durante la jornada escolar. La necesidad obliga y los alumnos zamoranos acudían a clase con ponchos y mantas para aminorar las bajas temperaturas de noviembre y diciembre. Hasta se ha puesto de moda la "manta escuela".
Los sacrificios han merecido la pena porque desde hace semanas no hay ningún aula en cuarentena en Zamora y en este trimestre solo 26 alumnos han dado positivo y apenas 8 docentes. En Castilla y León permanecen 40 aulas en cuarentena activa.
Hasta el subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco, felicitó en su comparecencia de los lunes de forma expresa a todos los miembros de la comunidad educativa por el desarrollo del curso escolar, muy especialmente a niños, niñas y adolescentes, maestros y profesores, que han dado "un gran ejemplo de resistencia y civismo a toda la sociedad zamorana".