En Zamora el sonido de las persianas echando el cierre y de los candados de los negocios suena de una manera dramática. Los anuncios de cierres de locales se suceden a una velocidad pasmosa que no llega a compensar con las aperturas de los cada vez más valientes emprendedores que apuestan por probar suerte en la capital zamorana.
Una de las últimas en sumarse al cierre ha sido La Quesería, ubicada en la calle Ramos Carrión y a las puertas de la Plaza Mayor. El que suponía uno de los puntos de venta más completos de la ciudad en cuanto a oferta de productos lácteos y con una importante representación de alimentos locales.
Una oferta que combinada con otros productos como embutidos, vino y productos típicos y que hoy supone el cierre de los "Sabores de Zamora" y que llegó a expandirse a otras ciudades como Valladolid. El adiós a un negocio que apostaba por los alimentos de cercanía y la apuesta por los agricultores, ganaderos y empresas de la tierra.