El subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco, expresó este martes su condena por el asesinato de Chloe, una joven de 15 años en la provincia de Alicante, ocurrido el pasado lunes, en lo que calificó como un nuevo caso de violencia de género. Blanco trasladó sus condolencias a la familia y amigos de la víctima, y recordó que este crimen eleva a 42 el número de mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en lo que va de año. Además, subrayó que ocho menores han sido asesinados en este mismo periodo como una forma de violencia dirigida a causar dolor a sus madres.
"Una sociedad democrática no puede consentir la violencia contra las mujeres. La violencia de género es una violencia estructural, y es imprescindible la lucha y la unidad de todas las instituciones y administraciones", afirmó Blanco durante su intervención.
El subdelegado destacó la importancia del nuevo protocolo que permite la convocatoria inmediata de actos de repulsa y visibilización tras la confirmación de un asesinato por violencia de género. En este contexto, valoró la unidad demostrada por representantes de distintas instituciones, como el presidente de la Diputación, la Delegación Territorial, el Ayuntamiento de Zamora y otros actores de la sociedad civil.
Blanco también aprovechó la ocasión para poner el foco en la realidad de la violencia de género en Zamora. Según los datos actuales, la provincia registra 249 casos activos, de los cuales 247 cuentan con órdenes de protección. Además, subrayó la gravedad de la situación al señalar que dos de estos casos afectan a menores. Asimismo, indicó que en dos situaciones se ha clasificado el nivel de riesgo como alto.
El subdelegado insistió en la necesidad de mantener la firmeza y la colaboración institucional para combatir una lacra que sigue arrebatando vidas. "La lucha contra la violencia de género debe ser un compromiso de toda la sociedad, y no podemos bajar la guardia", concluyó.