A veces, resolver determinadas patologías que provocan molestias que afectan a nuestro desarrollo diario supone pasar por quirófano. Un paso que hay que enfrentar con valentía, pues tras superarlo recuperaremos calidad de vida. En este grupo podríamos situar las operaciones de cirugía estética para solventar determinados problemas de salud, como la reducción de pecho para solucionar terribles dolores de espalda, entre otros.

Si estás interesado en ver las diferentes opciones en cirugía plástica y estética puedes encontrar más información aquí. Aunque para conocer más sobre estas intervenciones, hablamos con la cirujana estética Dra. García-Dihinx:

¿Cuáles son los principales problemas de salud por los que las personas se plantean una operación de cirugía estética?

El paciente que se plantea una cirugía estética, y estamos hablando de estética pura y no reparadora, su problema principal no es una cuestión de salud sino una necesidad emocional. Los motivos por los que alguien se somete a una operación de cirugía estética son seguridad, autoconfianza, autoestima, aceptación social, etc.

Por supuesto que la cirugía estética también puede ayudar a mejorar la salud del paciente. Por ejemplo, la cirugía de reducción de pecho además del componente estético permite aliviar dolores en la zona del cuello y la espalda.

Háblenos, por ejemplo, de la operación de reducción de pecho. ¿Cómo es esta intervención? ¿y la recuperación?

La cirugía de reducción de pecho consiste en el marcaje en la piel de la mana de un patrón de reducción de envoltura cutánea denominado patrón de Wise. Hay que elevar la areola y eliminar el tejido del polo inferior que es la parte donde se ubica el tejido mamario en exceso fruto de la lactación, el propio peso de la mana, edad, etc.

El tiempo de ejecución es de unas tres horas y el postoperatorio es muy asumible, con tan solo un día de ingreso operatorio. Se trata de una cirugía muy satisfactoria, ya que genera un antes y después en la calidad de vida de la paciente.

¿Cómo mejora la calidad de vida de estas personas tras la operación?

La mejora de la calidad de vida tras la cirugía de reducción de mamá es muy importante, ya que la mejora es tanto de índole física  como psicológica.

Físicamente la paciente mejora de los dolores de espalda, cervicalgias y dorsalgias. Es decir, de los dolores de cuello y escapular. Tanta es la mejora, que inmediatamente la paciente adquiere una postura más derecha y más erguida equilibrando abdomen con espalda. Además esta reducción de volumen le ayuda emocionalmente a enfrentarse con más seguridad a sus quehaceres mostrando una imagen de serenidad sin ocultar sus pechos.

¿Cuál es vuestro perfil más habitual de paciente? (edad, sexo, etc.).

El perfil más común sigue siendo mujer de clase media entre 20 y 40 años. Suelen ser mujeres trabajadoras y con un nivel de estudios medio. La franja de edad determina una demanda diferente de cirugía, las más jóvenes buscan seguridad en sí mismas y reforzar su vida sexual. Mientras que las más mayores buscan tratar los estigmas de la maternidad. La caída de las mamás, el abdomen laxo y grueso y la pérdida de tonicidad y textura de la piel les llevan a una cirugía en una edad en la que todavía sienten que les queda coquetería.

Cuando acuden por primera vez a vuestra consulta, ¿cual es el principal temor de los pacientes?

Los principales temores son la anestesia y el resultado.

El resultado les preocupa ya que la referencia de otras pacientes no es válida para ellas mismas. La cirugía no reproduce cuerpos idénticos, por ende tienen que aceptar que los tejidos y arquitectura sobre la que asienta la cirugía no es reproducible al 100%.

Por último, háblenos de la importancia de elegir a un buen profesional / cirujano a la hora de realizar una operación estética.

La experiencia del profesional así como su formación continuada es capital a la hora de elegir el cirujano. Revisar el historial laboral del cirujano al que vamos a confiar es de gran interés.

Complicaciones se pueden presentar en todas las cirugías, pero se sabe que las complicaciones disminuyen cuando el profesional se ha entregado de forma exclusiva al estudio, asistencia a congresos, visitas a clínicas pioneras en cirugías muy especializadas, etc.