viernes. 19.04.2024
Dormir
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Si normalmente sueles algún tipo de debilidad física o falta de energía, incluso al comenzar el día, puede que estés sufriendo una problemática conocida como astenia, la cual es capaz de afectar distintas partes del cuerpo, y que tienen diversas causas y soluciones que habrá que saber.

Si bien no se trata de una enfermedad como tal, sino de un síntoma de ciertas condiciones médicas, tanto temporales como crónicas, y también puede desarrollarse como un efecto secundario como consecuencia del consumo de algunos medicamentos, debemos intentar evitarla de inmediato.

De hecho, como puedes leer aquí, es asimismo uno de los tantos cuadros derivados del mal dormir. Aquellas personas que descansan en malas condiciones por la noche tienen más probabilidades reales de sufrir astenia, mientras que quienes padecen astenia seguramente no descansan.

¿Por qué aparece la astenia otoñal?

Típica de esta época específica del año, la astenia puede aparecer como resultado de diferentes eventos relacionados con la salud de los seres humanos, tales como las enfermedades de tiroides, gripes, anemias, fibromialgias, síndromes de fatiga crónica, enfermedades celíacas, depresión, etc.

Además, hay fármacos que si se ingieren regularmente pueden provocar los mismos efectos que ya mencionamos, como los antihistamínicos, los antidepresivos, o los tratamientos de quimioterapia. Algo similar pasa con las sobredosis de medicamentos y vitaminas que no están controladas.

En general, todos los diagnósticos intermedios o graves, y el propio envejecimiento del organismo, son facilitadores de la astenia otoñal, cuyas señales o indicios más evidentes son los temblores recurrentes e incontrolables, el movimiento lento, y los calambres y espasmos musculares. Normalmente estás personas también conviven con una debilidad constante sin explicación.

A medio y largo plazo, la incidencia de este inconveniente de salud puede traducirse en dificultades concretas, para hablar, para realizar expresiones faciales, para tragar y masticar, aún para respirar. Tampoco es extraña la debilidad en las extremidades y los golpes y caídas que derivan de ella.

¿Cómo combatir la astenia otoñal?

Considerando que la astenia está relacionada con una variedad de afecciones imposibles de resumir en un sólo artículo, lo más habitual es que se la combata previniéndola a través de las causas subyacentes y otras medidas que impiden que se desarrolle, o retrasan ese desarrollo.

Los pacientes tienen que llevar una dieta equilibrada, consumiendo todos los nutrientes importantes, además de realizar actividad física varias veces a la semana y ejercicios específicos para fortalecer los grupos musculares más afectados. También se le recomendará reducir la ingesta alcohólica y limitar al máximo la cafeína y los alimentos ultraprocesados, que no aportan nada al cuerpo.

Asimismo, los suplementos para complementar el régimen alimentario son una constante, y entre los más repetidos tenemos los de ácido fólico, hierro o vitamina B12 de haber alguna deficiencia.

Por último, es aconsejable reducir los niveles de estrés al mínimo y hacer lo que esté al alcance para descansar correctamente por las noches, contemplando la compra de los elementos de cama que se consideren indispensables para que la persona pueda recuperarse correctamente de su cansancio.

Astenia otoñal: ¿cuáles son sus síntomas y qué hacer para evitarla?