El primer rescate aéreo de noche en España con gafas de visión nocturna (GVN), de una persona que había sufrido un impacto de hielo en la cabeza y se encontraba en el refugio Elola, se ha llevado a cabo en Gredos por parte de los especialistas de la Guardia Civil.
Debido a la baja luminosidad por la llegada del ocaso, el personal de rescate optó con salir equipado con gafas de visión nocturna por si fuera necesario su empleo. Los agentes del Servicio Aéreo recogieron al Grupo de Rescate e intervención de Montaña (GREIM) de la Guardia Civil de Hoyos del Espino. Fue entonces cuando se decidió que por la escasa luz, la tripulación estableció realizar dicho rescate con las gafas de visión nocturna.
Estas gafas ofrecen una serie de mejoras como la localización de víctimas: las gafas de visión nocturna también pueden ayudar a los equipos de rescate a localizar a las víctimas con mayor facilidad, ya que pueden detectar el calor corporal o cualquier otra fuente de radiación infrarroja en la oscuridad.
Además, mejoran la visibilidad y amplifican la luz disponible, lo que permite a los pilotos y equipos de rescate ver con mayor claridad en condiciones de poca luz o incluso en completa oscuridad. Esto es especialmente útil durante operaciones de rescate nocturnas o en áreas con poca iluminación.