Zamora continúa enfrentando una situación preocupante en cuanto a violencia de género, con un total de 258 casos activos, de los cuales 4 se encuentran en situación de riesgo alto. Este dato ha sido revelado en una reciente intervención, destacando que en lo que va del mes de febrero se han producido 6 denuncias o hechos conocidos, 3 de ellas por parte de las víctimas y las otras 3 por acción policial, resultando en la detención de 5 personas.
De estas 6 denuncias, 5 corresponden a casos nuevos, lo que pone de manifiesto la dificultad que enfrentan las víctimas para dar un paso adelante y denunciar las situaciones de violencia. Cada uno de estos casos presenta circunstancias complejas y diversas, como la presencia de menores en algunos de los incidentes, así como lesiones físicas graves, incluidos golpes en el cuello, brazo y ojo derecho. También se han registrado incidentes relacionados con el quebrantamiento de condenas, con el uso de dispositivos de control telemático para los agresores, y la aparición de presuntos delitos relacionados con la intimidad, como el envío no autorizado de imágenes.
Además, algunos casos han involucrado a lo que se denomina "víctimas resistentes", aquellas que, a pesar de estar en riesgo de sufrir nuevos episodios de violencia, no desean recibir protección policial ni presentar denuncia. No obstante, la Policía Nacional y la Guardia Civil siguen el protocolo establecido y actúan de oficio ante situaciones de peligro.
La labor de las fuerzas de seguridad ha sido reconocida por su profesionalidad y rapidez, especialmente cuando se activan los sistemas de control, como el sistema de alertas en caso de quebrantamiento de medidas de protección. En estos casos, las fuerzas policiales intervienen de inmediato para garantizar la seguridad de las víctimas, lo que puede llevar a la detención de los agresores y su puesta a disposición judicial para que se adopten las medidas pertinentes.