Es uno de los actos más llamativos de la Semana Santa, y aunque el más conocido es el "vuelo" del Cristo de las Injurias, en esta ocasión los curiosos que se congregaban en la Catedral han podido disfrutar de otro momento para el recuerdo: los preparativos para colocar el Cristo de la Misericordia en su mesa procesional.
Con la ayuda de varios hermanos, la talla atribuida a Arnau Palla, sobrevoló por la seo de Zamora para ser colocada en el lugar desde el que será expuesto para que locales y visitantes lo admiren.
Desde ese momento, el Cristo de la Misericordia reposa en la catedral para acompañar a los hermanos de la Cofradía de Nuestra Madre de las Angustias en su desfile en la noche del Viernes Santo.
Galería de imágenes por Aroa Colmenero
