Un viaje al pasado para arreglar el futuro cuando es más incierto que nunca. Una comedia de situación con un mensaje, un trasfondo que habla del pasado, de los cambios que tienen que hacer las personas para crecer y evolucionar. Así es “Satisfaction”, una obra dirigida por Juanma Cifuentes y que llegará a Zamora para regalar risas y entretener al público en el Teatro Ramos Carrión.
Drama y comedia se dan la mano en el escenario donde “van a llorar, reír, entretenerse incluso alguno puede llegar a reflexionar”, tal y como apunta el actor gallego, Fran Nogueira. Y es que, en un momento en el que el futuro es más incierto que nunca y donde pensar en él es ya el presente, se hace necesaria una comedia que hable de nuestra existencia con proyección a lo que vendrá mañana. Una obra en la que a la autora, Blanca Bardagil, no le ha importado hacer elipsis, flashbacks e incluso viajes en el tiempo.
María del Mar Regueras, Marisa Zapata, Cristina Zapata y Fran Nogueira darán vida a un grupo de personajes que se enfrentan a una historia pasada desde el presente más realista. Cosas que en nuestros días suenan a cuentos para hablar de pasados que intentan resolver el presente con el fin de no tener consecuencias indeseadas en el futuro.
La “depresión” por el pasado o la “ansiedad” sobre el futuro mostrará lo que le ocurre a los personajes porque “dependen mucho” de otras líneas temporales. Algo que servirá para que “el espectador diga, quizá tengo que estar más tranquilo y ver la vida de otra manera”.
Una obra para todos los públicos y una apuesta “por algo diferente. Una comedia futurista, de humor, algo para pasar un buen rato, desconectar, y animarse a la cultura”, remarca la actriz, María del Mar Regueras, que se muestra “nerviosa” por su estreno en Zamora, por sus raíces, “es la tierra de mis padres”.
Pero para llegar al escenario del teatro el 11 de noviembre, hay “mucho trabajo. “Estamos contando una historia, que es una comedia de situación y que había que dejar bien limitados”, asegura Nogueira. Selección del elenco, aprender el guión, preparar la función para que “cuando llegas a los ensayos puedas pasar el texto con cierta soltura. Escenografía, vestuarios, efectos, sonidos... “hay mucho trabajo detrás”, remarca Regueras. Una labor incansable que comenzó en junio y que llegará al escenario en noviembre porque “hay más de lo que la gente se piensa”.
La emoción, las ganas, los nervios, la pasión y la emotividad llegarán a Zamora para deleitar a un público que esperan que disfrute. También a Valladolid, el 25 de noviembre.
