El incendio de Benavente acaecido este pasado viernes fue fruto de la intervención premeditada e intencionada del hombre. Así lo han concluido los técnicos del servicio de Medio Ambiente de la Consejería de la junta de Castilla y León que en un momento consideraron que el inicio del fuego se debió a un accidente relacionado con el uso de motores o maquinaria de tipo agrícola.
El balance diario de la evolución de los incendios en la Comunidad ha rectificado este dato tras las nuevas pesquisas y la investigación llevada a cabo por los expertos. Este fuego ha sido el último declarado en lo que llevamos de fin de semana, si bien su extinción fue rápida y apenas conllevó 80 minutos de trabajo por parte de los medios desplegados, si bien su peligrosidad se multiplica al encontrarnos ya en plena ola de calor con unas temperaturas disparadas y un campo afectado por la sequía.
Por el momento el incendio de Benavente -que se saldó con 0,2 hectáreas de terreno afectado sin calificar- es el único junto al fuego declarado en San Cristóbal de Entreviñas que esconde la acción premeditada del hombre mientras el resto se deben a fallos o a fenómenos meteorológicos.
Zamora y el resto de Castilla y León llevan desde el pasado 12 de junio ya en época de peligro alto de incendios forestales al adelantarse la temporada ante los adversos pronósticos climáticos. Para hoy se esperan de nuevo máximas que podrían superar los 37 grados en diversas zonas de la provincia.