Debido al gran número de ataques que un especimen de lobo de la zona está produciendo a los ganaderos de Pereruela y alrededores, la Junta de Castilla y León ha permitido el abatimiento del animal.
Alberto Castro ha destacado que se trata de un "hecho excepcional" al que se han visto obligados por los repetidos ataques de este especimen, a la par que ha explicado que es complicado encontrar al animal debido al gran terreno que recorre.
Ahora la Junta pone todos sus esfuerzos en suplir el daño causado por el cánido y en apoyar al ganadero que ha perdido las ovejas en los ataques.