La localidad de Mombuey volvió a brillar este fin de semana con la celebración del Fite, una de las tradiciones más antiguas y emblemáticas del municipio, que simboliza la Noche de Ánimas y una divertida fiesta de Halloween organizada por la Asociación Cultural La Candonga.
El Fite, con referencias documentadas desde el siglo XVI, mantiene viva la esencia de las antiguas celebraciones de Ánimas. Durante la noche del 1 al 2 de noviembre, los vecinos encienden una gran hoguera con un roble en el centro, símbolo del fuego que guía y honra a los difuntos.
Cuando las llamas se fueron consumiendo, los jóvenes del pueblo, bajo la supervisión de los más veteranos, soltaron los cables que sujetaban el roble, gesto que marca el momento más simbólico de la noche. Después, como manda la costumbre, llegó el momento del tradicional asado, punto de encuentro para compartir conversación, música y buen ambiente alrededor del fuego.
La festividad se completó con una noche de Halloween celebrada el sábado en el local cultural “El Matadero”, donde los vecinos disfrutaron de una velada de disfraces, sustos y risas, mostrando cómo la tradición y las celebraciones modernas pueden convivir en perfecta armonía.
Entre el resplandor del fuego y la emoción del reencuentro, Mombuey volvió a rendir homenaje a sus raíces, manteniendo viva una costumbre que une a generaciones y refuerza el espíritu comunitario en una de las noches más especiales del año.